Los cadáveres de las cuatro españolas fallecidas el martes en un accidente de tráfico en la ciudad peruana de Cuzco son repatriados este viernes a España y aterrizarán a primera hora del sábado en Barajas, informó la funeraria contratada para hacerse cargo de los féretros.

Aunque los ataúdes con los cadáveres de Soraya Macías, Lorena Guerrero, Lidia Monjas y María José Such llegaron a Lima en la tarde de este jueves, y tras realizar una serie de trámites en la agencia funeraria se inició el proceso de repatriación.

El Consulado español en Perú quiere ahorrar a las familias el viaje hasta el país andino para repatriar a sus seres queridos, por lo que ha acelerado al máximo estos trámites, pero ha sido imposible completarlos antes.

De hecho, los féretros llegados desde Cuzco deben ser reacondicionados por la agencia funeraria, que además procederá a un nuevo embalsamamiento de los cadáveres y a preparar los ataúdes con las debidas medidas de presión y gases necesarios para un viaje internacional en avión.

Además, fuentes de Iberia, la aerolínea que se encargará de llevar los cadáveres hasta España, señalaron que mientras el destino final de dos de los féretros es Madrid, los otros dos deben viajar hasta Málaga y Valencia.

Para ello es necesario coordinar el tránsito de un avión a otro en el aeropuerto de la capital española, otro requisito indispensable para poder iniciar el proceso de repatriación.

Los heridos evolucionan bien

Por otra parte, los otros cinco españoles involucrados en el accidente de tráfico evolucionan favorablemente de las heridas sufridas, aunque uno de ellos, Alan Sandoja, sigue en estado crítico. Sus familiares y amigos han podido visitarlos este mismo viernes.

Dos de los heridos van a necesitar al menos diez días de hospitalización, pero se encuentran fuera de peligro, según dijeron fuentes de la clínica donde están ingresados.

En otro hospital de la ciudad, la Clínica Pardo, se encuentra Alan Sandoja, con un politraumatismo craneoencefálico severo (un edema cerebral), y las fuentes de ese hospital se limitaron a señalar que su estado es "estable".