Deborah Harry, el gran icono de la 'new wave' neoyorquina, cumple 65 años

  • Debbie Harry combinó como nadie la actitud sexy con el espíritu punk.
  • Su banda, Blondie, está de gira por el Reino Unido y lanzará un nuevo disco el mes de septiembre.
Debbie Harry, cantante de Blondie, es uno de los grandes iconos de la música del siglo xx.
Debbie Harry, cantante de Blondie, es uno de los grandes iconos de la música del siglo xx.
ARCHIVO
Debbie Harry, cantante de Blondie, es uno de los grandes iconos de la música del siglo xx.

¿Qué tienen en común Helen Mirren, Lula Da Silva, Mia Farrow,Fernando Esteso y Debbie Harry? Así es. Todos ellos han cumplido –o lo harán durante este 2010– la que por el momento sigue siendo en nuestro país la edad legal de jubilación. Y sin embargo, sólo nuestra protagonista sigue levantando silbidos de lasciva admiración con cada aparición en público, con cada movimiento de sus curvas sinuosas, con cada mirada y cada apasionado gesto sobre el escenario.

Debbie Harry, la diva de la new wave, se abrió paso en una escena musical copada casi exclusivamente por hombres. Combinó con inimitable habilidad la actitud sexy con el descaro y la irreverencia del punk. Lideró una banda, Blondie, capaz de aunar estilos tan dispares como el rock, el pop, la música disco o el reggae. Vendió 30 millones de discos. Y a día de hoy, sigue al pie del cañón. Y no tiene intención alguna de apearse del escenario.

Debbie nació en Miami el 1 de julio de 1945. Lo hizo con el nombre de Angela Trimble, pero sus padres adoptivos, una joven pareja de Hawthorne, Nueva Jersey, la rebautizaron como Deborah Ann. Fue una adolescente inquieta, quizá demasiado: antes de cumplir los 18 se marchó de casa con destino a la cercana Nueva York. Tenía en la cabeza un objetivo claro: convertirse en una estrella del rock.

Sola en la ciudad

A mediados de los 60, la Gran Manzana vivía un momento de salvaje eclosión cultural. Por un lado, el movimiento hippy pregonaba el amor libre a base de rock psicodélico, canción protesta y drogas alucinógenas. En el otro extremo, la Velvet Underground de Lou Reed asombraba y repugnaba a partes iguales con sus espectáculos de ruido, violencia y caos, antítesis de todo lo hippy. En mitad de aquella vorágine, la joven Debbie buscaba su sitio.

La banda de folk The Wind in the Willow brindó a Harry la oportunidad de dar sus primeros y erráticos pasos en la música. Pero no fue hasta que conoció a Chris Stein, recién estrenada la década de los 70, cuando su incipiente carrera dio un giro radical. Juntos formaron una de las alianzas más estables de la historia del rock. Una relación que también lo fue en el terreno sentimental hasta los años 90, cuando se separaron amistosamente. Hoy día siguen tocando juntos.

Sin bragas y a lo loco

Un camionero, cuyo nombre permanecerá para siempre en el anonimato, fue el responsable del bautizo de Blondie como banda. Aquel piropo ("rubita") era realmente sutil comparado con los que solía recibir la bella joven. A Chris y Debbie, que llevaban tiempo buscando un nombre para el grupo que empezara por B para poder situar sus discos cerca de los de los Beatles en las tiendas, les pareció idóneo.

El nombre sólo era una excusa para comenzar a tocar por toda la ciudad. El CBGB, un pequeño local situado en el número 315 de la calle Bowery, se convertiría en el epicentro de la pujante escena punk de la ciudad. Además de Blondie, Ramones, Television o Talking Heads hicieron de él su escenario habitual. Pero había algo que diferenciaba los conciertos de Blondie de los del resto: la propia Debbie.

Despojada de cualquier tipo de vergüenza escénica, actuaba a menudo ataviada sólo con una camiseta, dejando entrever su sexo y revolucionando al público. Pero más allá de su espectacular anatomía, había canciones. Grandes canciones.

Días de gloria

La prensa comenzó a hacerse eco de lo que se estaba gestando en Nueva York y bautizó el fenómeno como 'new wave' (nueva ola), en contraposición a una etiqueta, la del punk, que adolecía de una sonoridad poco compatible con las radios comerciales. En 1978, Blondie publicó el visionario 'Parallel  lines'  y el éxito llamó a su puerta.

Los días de gloria se prolongaron cuatro años más. Tras editar 'The Hunter' y sin haber conseguido igualar el éxito de su obra cumbre, Blondie se disolvió, dando comienzo la prolífica carrera en solitario de Debbie. Tuvieron que pasar catorce años para que anunciaran su regreso. En 1998, 'No exit' y su single 'Maria' les devolvieron a las listas de éxitos. Hoy, convertida en un icono del siglo xx, aunque perfectamente integrada en el xxi, Debbie Harry sigue llevando  a los escenarios del planeta su frase más célebre: "Las rubias son más divertidas".

'Panic of girls' se hace esperar

El lanzamiento del noveno disco de estudio de Blondie,'Panic of girls' (el primero desde hace seis años), estaba previsto para el pasado mes de junio. Sin embargo, la gira que el grupo está realizando por tierras británicas ha obligado a retrasarlo hasta septiembre. Por el momento, sólo se sabe que tendrá 16 canciones. Mientras llega, sus fans pueden disfrutar del vídeo de una de ellas, 'What I Heard', que ya circula por la Red.

No pases de...

Una película. 'Burning Down the House'. El documental, estrenado el año pasado en el festival de Tribeca y aún no editado en DVD, repasa la historia del célebre CBGB, el local que vio nacer a las bandas clave del punk neoyorquino, desde su apertura en 1973 hasta su cierre en 2006 por problemas económicos. Plain Jane Productions.
Un disco. 'Parallel Lines'. En su tercer LP, Blondie alcanzaban su cénit creativo y el éxito a nivel mundial, gracias a hits incontestables como' Heart of Glass', 'One way or another' o la versión de 'The Nerves Hanging on the telephone'.  Un auténtico manual de cómo hacer singles pegadizos a mitad de camino entre el punk, el rock y la música disco. Chrysalis Records. 12 euros.
Un libro. 'New Wave & Post-Punk'. ¿Qué pasó en el mundo musical tras el arrollador auge y caída de los Sex Pistols? Desde PiL a Depeche Mode, pasando por Joy Division o la propia Debbie, que ilustra la portada, un grupo de periodistas españoles indaga en lo acontecido de 1978 a 1984 y su influencia en los sonidos de nuestros días. T&B. 21,50 euros.
Mostrar comentarios

Códigos Descuento