Asimismo, el conselleiro también hizo hincapié en el hecho de que el próximo Año Santo no se celebrará hasta 2011 y llamó la atención sobre la necesidad de adecuar las exenciones al nuevo escenario abierto por la visita del Papa Benedicto XVI a Santiago el próximo 6 de noviembre.

Según Roberto Varela "los números presentados son reveladores del importante papel que el Año Santo está jugando como dinamizador social" y "económico". En esta línea, señaló que los cinco primeros meses del año revelan cifras de peregrinos "que suponen un 50 por ciento más" que en 2004 y el doble con respecto a 2009.

De la misma manera, las pernoctaciones turísticas del primer cuatrimestre de 2010 significan un incremento del 5 por ciento frente a 2009 y del 6,5 por ciento con respecto al último Año Santo. En consecuencia, pidió exenciones fiscales para el próximo año con el objetivo de que el 800 aniversario de la Catedral "se convierta en un revulsivo y en un proyecto ilusionante para los agentes económicos y sociales".

Las exenciones fiscales, explicó Varela, supondrían la captación de más fondos y recursos de entidades que se puedan beneficiar de los incentivos y alcanzar, de esta manera, una mayor promoción del Xacobeo, con el fin de "divulgar el conocimiento de la cultura gallega y española en todo el mundo".