El equipo de Gobierno y el grupo de la oposición en el Ayuntamiento de Toledo acordaron hoy reducir el gasto del Consistorio en la línea que marca el guión estipulado por la Federación de Municipios y Provincias (FEMP). Así lo confirmaron tanto el alcalde, Emiliano García-Page, como el presidente del Grupo Municipal, Lamberto García-Pineda en la rueda de prensa que ofrecieron durante un receso del encuentro que mantuvieron hoy, y en el que alcanzaron algunos puntos de acuerdo, pero en la que también dejaron de manifiesto sus discrepancias.

En esta comparecencia conjunta no se habló de ningún plazo de tiempo concreto para presentar esa 'hoja de ruta' que ha de guiar la economía del Consistorio toledano. Fue el alcalde el que dijo que ese documento, que estipulará el 'techo' de gasto, podría ver la luz "antes de verano".

El alcalde, que comenzó agradeciendo la voluntad de diálogo del PP "porque en el ambiente que se vive en el país hace que esto sea una excepción", sí dejó claro que el equipo de Gobierno no se plantea la creación de nuevas figuras impositivas, es más, pretender llevar a cabo una reducción moderada de los mismas.

García-Page, que aseguró que estos acuerdos alcanzados hoy han de seguir debatiéndose en la reunión de la Junta de Portavoces, para pasar después a la Comisión Economía y Hacienda, y morir finalmente en el pleno, indicó que tanto Gobierno municipal como oposición sí coinciden en que no solo este ejercicio ha de ser austero, sino que el escenario del 2011 también ha de ser de contención.

Ejecución del presupuesto del 2009

Mientras, el presidente de los 'populares' toledanos aseguró que su grupo siempre responderá a la llamada del equipo de Gobierno y está dispuesto a ayudar en aquello en "lo que coincidan", al tiempo que lamentó que una vez más sean los ayuntamientos, que presentan un déficit inferior al de las comunidades autónomas, los que se tengan que apretar el cinturón, siendo "los que una vez más pagan los vidrios rotos".

Dicho esto, el edil de la oposición reclamó públicamente al alcalde que lleve al próximo pleno la ejecución del presupuesto del ejercicio 2009, que su grupo aún no conoce, ya que puede servir a su vez para mejorar y elaborar las cuentas municipales del 2011.

No obstante, García-Pineda incidió en que el reajuste no solo ha de ser para el personal del Ayuntamiento, esto es para los funcionarios y los concejales, sino que la constricción de gasto ha de ser extensiva al gasto corriente, y por su puesto han de reducirse partidas de "seguridad, de representación, o de dietas".

El presidente de los 'populares' toledanos ahondo también en la necesidad de agilizar proyectos importantes para la ciudad que se están retrasando, como es el caso del Palacio de Congresos, o el desarrollo urbanístico de ciertas zonas, a fin de incentivar la economía capitalina "que pasa por horas muy bajas", y dar salida al importante número de toledanos que en estos momentos están desempleados.

Lo que sí dejó claro Lamberto García Pineda es la oposición del grupo que preside a una subida fiscal por encima del IPC, como "ya se ha dado" en algunos capítulos, advirtiendo al alcalde de que su rechazo será "total y absoluto" en caso de que se subiera una décima más la presión fiscal que soportan los toledanos.DISCREPANCIAS

No obstante, el equipo de Gobierno y el PP dejaron en evidencia algunos puntos de discrepancia, entre ellos la financiación de algunos servicios municipales. Sobre este asunto el alcalde de Toledo se mostró partidario de acomodar algunos servicios públicos al coste real que tienen, porque hay muchos que están "hipersubvencionados", y en estos momentos no se puede obviar lo que vale las cosas, eso sí, haciendo un esfuerzo "equilibrado", dijo.

"Una manera de contribuir al esfuerzo del país es que la gente pague lo que tiene que pagar por subirse al autobús", manifestó García-Page, que reiteró que para el siguiente mandato "si no me tropiezo con Arturo García-Tizón", el equipo de Gobierno hará un "corte radical en los servicios de manera que los toledanos paguen lo mismo o menos a costa de que la ciudad empiece a recoger los beneficios que suponen recibir dos millones de turistas".

"Los toledanos empadronados que pagan sus servicios aquí tendrán los servicios subvencionados, el resto nada", insistió el alcalde de Toledo. A este respecto el presidente del PP de Toledo mostró su rechazo al planteamiento que García-Page hace de los beneficios que reporta a la ciudad el turismo, pues según afirmó "habrá otra manera de recaudar dinero, pero en principio esa no me suena bien".