CCOO Euskadi cree que la ampliación del plazo para la reforma laboral es "una estratregia de dilación" del Gobierno

Le advierte de que, si hace un decreto "que satisfaga las posiciones más recalcitrantes" de la CEOE, se encontrará con una huelga general

El secretario general del CC.OO. Euskadi, Unai Sordo, consideró hoy que la ampliación del plazo para acordar la reforma laboral hasta el 11 de junio es "una estratregia de dilación" del Gobierno y le advirtió de que, si hace un decreto "que satisfaga las posiciones más recalcitrantes" de la CEOE, "se encontrará con una huelga general".

En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Sordo manifestó que "económicamente la situación es delicada, se están planteando medidas de ajuste muy serias, y se plantea una escalada de confrontación sindical que puede derivar en la máxima expresión en un plazo no demasiado largo si se confirman los peores augurios que se puede estar planteando en la no negociación o en el fin de la negociación del diálogo social en Madrid y en la posibilidad de intervención unilateral del Gobierno con una reforma laboral, si ésta fuera lesiva para los trabajadores".

Para el representante de Comisiones Obreras, los sindicatos se están moviendo "desde hace tiempo" y recordó que ha habido "movilizaciones de muchísimo calado en Euskadi y también en España".

"Y ha habido una oportunidad y un intento absolutamente responsable, por un lado, pero también riguroso por parte de las organizaciones sindicales de avanzar en espacios de negociación que nos permitieran mejorar sustancialmente un mercado de trabajo que tiene problemas serios", apuntó.

A su juicio, "las tasas de desempleo y de precariedad laboral exigían ese esfuerzo por mejorar un mercado de trabajo que presenta problemas serios". "Nos hemos encontrado con unas contrapartes que no han coadyuvado nada en esta tarea, con una patronal que ha intentado sistemáticamente bloquear estas posiciones y con una actuación del Gobierno que tampoco ha sido especialmente acertada", apuntó.

En este sentido, señaló que, para ellos, "la movilización y negociación son las dos caras de una misma moneda, que es la de la acción sindical". "Y estamos en un contexto en el que la confrontación sindical tiene pinta de que va a subir todavía bastantes enteros para intentar que el conjunto de los trabajadores no paguemos todos los efectos de la crisis, que está siendo muy dura y que todavía lo va a ser", dijo.

El plazo

El secretario general de CC.OO. Euskadi se refirió a la ampliación del plazo para acordar la reforma laboral hasta el 11 de junio y aseguró que, "por negociar no va a ser, por intentar apurar las posibilidades de negociación no va a ser", pero precisó que esto "no es tanto una cuestión de tiempos como de conceptos de fondo".

"Bajo mi punto de vista, la CEOE, la patronal española, está bloqueando sistemáticamente las posibilidades de llegar a un acuerdo de negociación. Está defendiendo las posiciones del tejido productivo más cutre de España frente a otras posiciones que podrían avanzar en mejorar de una forma importante el mercado de trabajo en el futuro y no descarto que no pueda haber determinadas motivaciones políticas a la hora de no concretar un acuerdo en la reforma del mercado de trabajo", dijo.

A su juicio, "no ha ayudado para nada la intervención del Gobierno con el plan de ajuste" porque "le ha dado bazas a la CEOE para pensar que, si no hay un acuerdo, la legislación va a ser netamente favorable a lo que ellos están planteando en las mesas". "Se está negociando ahora mismo en Madrid, pero no tiene esto una buena pinta porque es verdad que no parece que lo que antes de ayer era un desacuerdo vaya a variar en estos días", dijo.

Unai Sordo dijo que "este nuevo alargamiento de plazo por parte del Gobierno nos parece más una cierta estrategia de dilación". "Creo que la patronal no está dispuesta a avanzar en, de verdad, conseguir que el mercado de trabajo se mejore sustancialmente sin centrar toda su artillería en el coste del despido, en la precarización de la contratación y en el incremento de la disponibilidad del empresario a la hora de determinar las condiciones de trabajo de la empresa, saltándose, incluso, lo que disponen los convenios colectivos, porque ahí está la madre del cordero de lo que se puede estar negociando o no negociando", señaló.

En su opinión, "el Gobierno haría mal en hacer un decreto que satisficiera las posiciones más recalcitrantes que se están dando en la patronal española". "Se encontraría con una huelga general, sin ningún tipo de dudas", dijo.

Plan de ajuste

Sordo manifestó que el plan de ajuste "es equivocado porque es injusto, muy desequilibrado y antieconómico". "El efecto en la propia situación económica y en la creación de empleo va a tener efectos perversos", aseveró.

En este sentido, recordó la huelga general de la función pública convocada para el 8 de junio, "que es una movilización general porque muchas de las medidas que se recogen en ese plan de ajuste afectan al conjunto de la sociedad". Además, recordó que las propuestas del lehendakari, Patxi López, también suponen "el incumplimiento de pactos suscritos en la función pública en Euskadi".

Además, señaló que, para CC.OO., "la huelga general ni es un fetiche ni un fin en sí mismo, sino una herramienta para reforzar" su posición en las mesas negociadoras y "para impedir que todos los efectos de la crisis sigan cayendo sobre los más desfavorecidos".

"No pueden salir absolutamente de rositas esos espacios de la economía financiera, de la economía especulativa, de las grandes empresas y de los grandes capitales, que son los que han generado esta situación insostenible a nivel mundial", dijo.

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