El director del INA pide que el papel preponderante de Aragón en nanotecnología sea "un proyecto estable"

Ricardo Ibarra sostiene que la nanociencia "atrae talento, conocimiento y comienza a tener impacto en el tejido industrial"

El director del Instituto de Nanociencia de Aragón (INA), ubicado en Zaragoza, Ricardo Ibarra, pidió hoy que se siga impulsando la investigación en la Comunidad "y se articulen los medios necesarios para que el esfuerzo y el papel preponderante que ha adquirido Aragón durante estos últimos años en nanotecnología y biomedicina se traduzca en un proyecto estable y con proyección hacia la sociedad".

En la apertura de la Jornada de inauguración científica del INA, que se celebró hoy en la capital aragonesa, Ibarra señaló que "Aragón tiene muy buenos científicos y se ha posicionado en primera línea en algunos campos, uno de ellos la nanotecnología en biomedicina", en el que lidera "probablemente los dos proyectos más importantes a nivel nacional": Consolider y Ciber.

Ibarra sostuvo que llegar a esta situación "ha sido posible gracias a que esta región contaba con los elementos básicos para el éxito de la empresa: investigadores bien preparados, acceso a las infraestructuras necesarias para poder avanzar en sus investigaciones, un entusiasmo colectivo muy importante, un rectorado que entendió el proyecto y un Gobierno autonómico que lo ha apoyado incondicionalmente".

"La investigación del nanocosmos necesita de unas infraestructuras de las que no disponíamos y, por otra parte, había que hacer un esfuerzo de colaboración entre grupos procedentes de las distintas áreas de la investigación, dado el carácter interdisciplinar de la nanociencia. Durante estos últimos años, y principalmente durante el último año, gracias al esfuerzo de nuestros investigadores y técnicos se ha puesto en marcha una serie de laboratorios interdisciplinares que nos permiten obtener nanoestructura y realizar una cuidadosa caracterización", expuso.

Así añadió que "el control de la materia a nivel nanométrico constituye una revolución científica y unas consecuencias económicas y sociales que comienzan a ser palpables", de manera que "nos encontramos en una situación única en nuestro país para desarrollar un papel destacado en el campo de la nanociencia".

Un hecho que "va a marcar un avance en nuestro entorno desde varios puntos de vista": investigadores con capacidad de realizar una investigación puntera a nivel internacional sobre nuevos fenómenos, formación de nuevos investigadores y profesionales en las tecnologías más avanzadas, permeabilidad en el entorno industrial de nuevos métodos de caracterización y análisis que les reportarán un increíble valor añadido a sus productos, o innovación de los métodos de tratamiento de cáncer, por ejemplo, y de diagnóstico precoz".

"Abordar estos retos es posible por la naturaleza interdisciplinar de nuestro instituto en el que médicos, físicos, químicos, bioquímicos, veterinarios e ingenieros aúnan, gracias a la apuesta que se ha realizado y la nueva infraestructura, un polo científico de primera magnitud: se lideran proyectos internacionales de envergadura y se cuenta con nosotros a nivel nacional e internacional", afirmó.

Ibarra consideró que Aragón, "reconocida por su larga historia, está dando un salto espectacular en algunas disciplinas, una de ellas es la nanociencia, que atrae talento, conocimiento y comienza a tener impacto en el tejido industrial", un hecho que, a su juicio, debe aprovecharse para "aglutinar sinergias con otros institutos que comparten este espacio tan singular, un espacio de gran capacidad científico-técnica".

"Ello va a poder permitirnos avanzar en campos concretos, los retos en la investigación científica son una carrera de fondo y no se puede levantar la guardia, hay que apoyarla de forma continuada pues invertir en conocimiento es tender puentes hacia una sociedad más desarrollada tecnológicamente, con mayor confort y más libre. Especialmente es necesario este esfuerzo en momentos de crisis", concluyó.

Competitividad económica

El acto contó con la presencia de la consejera de Ciencia, Tecnología y Universidad del Gobierno de Aragón, Pilar Ventura, que sostuvo que el sistema científico aragonés "tiene que lograr no sólo ser puntero en investigación básica, sino que debe alimentar los procesos de innovación que constituyen la fuente principal de competitividad económica".

Ventura destacó que "el apoyo del Gobierno de Aragón a la I+D+i como motor de desarrollo económico de la Comunidad, el incremento de recursos humanos altamente cualificados y el impulso a la transferencia tecnológica y a la innovación, han sido líneas estratégicas básicas de nuestras políticas durante estos últimos años". "Aragón está preparada para unas tecnologías avanzadas y que debe situarse a la vanguardia científico-tecnológica a escala internacional", afirmó.

La consejera consideró que "fomentando el trabajo en grupos multidisciplinares, la colaboración entre institutos y centros de excelencia y entre la Universidad y las empresas, es posible llegar a conseguir la convergencia de sectores nuevos con otros tradicionales, especialmente si se potencia, como tratamos de hacer desde el Gobierno, las denominadas tecnologías conductoras de la innovación NBIC (Nanotecnología, Biotecnología y las Tecnologías de la Información y la Comunicación)".

Ventura subrayó el papel de la Universidad, que, "de ser una institución centrada exclusivamente en la enseñanza y la investigación básica, ha logrado convertir los conocimientos que crea en innovaciones prácticas y exportar esos conocimientos favoreciendo el desarrollo socioeconómico y su interrelación con el mundo productivo, a través de una adecuada transferencia de conocimientos que permite una aplicación empresarial y social idónea".

Por su parte, el rector de la Universidad de Zaragoza, Manuel López, recordó que "se habla de la necesidad de la innovación y la alta formación para poder crear una estructura que sea sostenible y menos vulnerable a crisis financieras de la economía de lo no real que nos ha llevado a situaciones como ésta". "En este caso nos ha pillado bien preparados en una cuestión que está en la frontera del conocimiento y de la innovación y la nueva tecnología hacia la que marcha la sociedad del siglo XXI", afirmó.

López agradeció al presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, "que haya sido siempre un entusiasta de la nanociencia y el que ha dado el impulso político decidido que han cogido con sumo gusto los consejeros de Ciencia, que siempre han intervenido decididamente a favor de este instituto".

Por último, concluyó que "nada es posible en nuestra universidad, docencia o investigación sin que exista un grupo humano convencido competente e ilusionado que trabaje por ello".

El INA es uno de los centros de investigación más avanzados y completos de España. Cuenta con un equipo de más de un centenar de personas con excelente formación en diversas áreas del conocimiento. Aborda líneas de investigación en tres grandes áreas relacionadas con la nanobiomedicina, con la variación de las propiedades físicas relacionadas con la nanoescala y con la obtención de todos aquellos materiales que tienen interés y relevancia por su estructura nanométrica.

El Instituto de Nanociencia tiene tres grandes objetivos: en primer lugar, desarrollar una investigación de excelencia competitiva a escala internacional; en segundo lugar, mantener una formación de jóvenes investigadores y profesionales en las tecnologías más avanzadas; y, finalmente, impulsar la transferencia tecnológica que permita el enriquecimiento del tejido industrial. Fruto de este esfuerzo, se han obtenido numerosas patentes con trascendencia internacional y se han creado dos empresas spin-off.

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