"La crisis que azotó al sector turístico canario en 2008 nos ha marcado un antes, a todos, y ahora hay un después para todo el mundo, no sólo para el sector público, sino también para el privado, en el que tendremos que trabajar desde una perspectiva de futuro, pero totalmente orientada hacia una restricción mayor del gasto", dijo.

De esta manera, Martín entendió que esta "reconversión" irá afectando a todos, por lo que abogó por convivir con la situación, ya que se vivieron momentos de bonanza, "que no van a volver", en los que hubo una cierta expansión, mientras indicó que en la actualidad tendrá que producirse una reconversión y reestructuración, "incluso afectando a las federaciones, confederaciones, cámaras de comercio, entre otras".

Aquí, la consejera hizo especial hincapié en que no es que se haya vivido por encima de las posibilidades, sino que se vivió "el momento que se estaba viviendo", recordando que una de las principales fuentes de ingresos de las federaciones es la cuota de los establecimientos turísticos.

"Ante una situación donde baja la rentabilidad, todos se aprietan el cinturón, moderan el gasto. Por lo tanto, no creo que estuvieran por encima de sus posibilidades, sino que estaban viviendo una época de cierta bonanza", concluyó.