En la presentación del programa también estuvieron presentes la Gerente del Servicio de Salud del Principado de Asturias, Sespa, Elena Arias, y la responsable de la Unidad de Atención al Cáncer del Sespa, Isabel Palacio.

Palacio fue la encargada de desgranar el contenido de este segundo programa que tiene por objetivo avanzar en el abordaje integral de la enfermedad, dando prioridad a la prevención, la mejora de la asistencia, el acortamiento de los tiempos de respuesta, la incorporación de nuevos avances, y potenciando la investigación y la información de los pacientes y los profesionales.

En este sentido, Elena Arias afirmó que el fin ultimo no es otro que el compromiso con los ciudadanos, tratando de reducir la incidencia y la mortalidad del cáncer en Asturias y obtener mejores resultados en la calidad asistencial que se presta a los pacientes oncológicos y a sus familiares.

Para conseguir estos fines, el documento define seis líneas de actuación centrales que a su vez engloban un total de 45 objetivos y 118 acciones que son consideradas esenciales para conseguir un mejor abordaje de la enfermedad en Asturias.

También se han incluido seis compromisos de la Administración Sanitaria con los ciudadanos, que son la mejor garantía de que la atención al cáncer en Asturias seguirá la línea de progreso que ha venido manteniendo en los últimos años.

Entre esas previsones destacan la puesta en marcha de los equipos de cuidados paliativos integrados por un médico, una enfermera y el apoyo de los trabajadores sociales de los centros médicos. El uno de junio empezarán a funcionar tres nuevos equipos en Oviedo, dos en Avilés, uno en Jarrio, uno en el área de Mieres y otro en el área del Nalón. En octubre se incorporará un equipo en Cangas del Narcea y otro en Arriondas.

Palacio afirmó que en el programa también se prevé llevar a cabo una reorganización de la cirugía oncológica. "Lo que se busca es alcanzar mejores resultados en el proceso asistencial al paciente con cáncer, mejorando la calidad y la organización de los procesos, identificación y difusión de buenas prácticas y en la calidad percibida por el paciente", dijo palacios que añadió que otro objetivo pasa por "optimizar las tecnologías sanitarias para mejorar la eficiencia de los recursos humanos y materiales".

En cuanto a la prevención, el consejero indicó que hoy sabemos que el cáncer se origina por acumulación de daños en nuestro genoma y, por ello, animó a la población asturiana a "cuidarlo" para reducir la incidencia y la mortalidad por cáncer.

Globalmente, en el periodo 2001-2004 —últimos datos disponibles—, 23.453 personas residentes en Asturias fueron diagnosticadas de un tumor maligno. El 61% de los casos correspondió a hombres y el 39% a mujeres. La media anual de casos nuevos diagnosticados en este periodo fue de 5.800, 3.500 en hombres y 2.300 en mujeres.

A pesar de diagnosticarse más casos de cáncer, lo que tiene que ver con la mayor esperanza de vida de la población, las tasas de mortalidad han descendido. La media anual de fallecimientos de cáncer en este último periodo fue de 3.354 personas, de las que el 62% son varones y el 38% restante mujeres. Durante 2008 fallecieron por cáncer 3.602 personas en Asturias, el 28% de todas las defunciones.