El concejal señaló que se encuentran "en plazo" y que, a pesar de los numerosos obstáculos con los que se ha encontrado, el equipo de gobierno ha conseguido cumplir el plazo de siete meses que había marcado la Consejería de Fomento, a la hora de aprobar las normas urbanísticas transitorias, elaboradas para evitar la entrada en vigor del Plan de 1.986 y la paralización económica y la inseguridad jurídica que hubiese provocado una ordenación urbanística de hace 25 años, según recordó Feliciano Fernández.

El documento que se llevará a Pleno el próximo miércoles y que cuenta con todos los informes técnicos favorables, ha incorporado las exigencias y recomendaciones de los informes sectoriales y de la Memoria Ambiental, así como algunas de las alegaciones presentadas durante el último periodo de exposición pública que permiten corregir pequeños errores o introducir ajustes.

Entre los cambios más significativos, enumeró el concejal de Urbanismo, destaca el incremento del suelo natural protegido que afecta sobre todo a las zonas de ribera y a los espacios que tienen un especial valor paisajístico o natural, así como la supresión de barreras arquitectónicas para mejorar la accesibilidad.

Ninguno de estos cambios, precisó, constituye una modificación sustancial con respecto al documento aprobado en diciembre de modo que no es necesaria una nueva exposición pública.

Una vez que el documento definitivo sea aprobado por el Pleno será remitido a la Junta de Castilla y León. La Consejería de Fomento comprobará nuevamente que el documento se ajusta a la normativa para su aprobación definitiva y publicación en el BOCyL.

El concejal de Urbanismo señaló que el nuevo PGOU "es un plan garantista y participativo". Garantista porque se ha sometido a tres periodos de exposición pública con una amplia difusión entre los ciudadanos, participativo porque asume un importantísimo volumen de las alegaciones presentadas tanto por los ciudadanos como los grupos políticos. Recoge también las sugerencias de los técnicos y las exigencias y recomendaciones de los informes sectoriales.

Este proceso y la incorporación de la abundante normativa que ha entrado en vigor en los últimos años hacen que éste sea un documento nuevo con respecto al Plan del 2001 y a la revisión aprobada inicialmente en enero del 2007.

Feliciano Fernández concluyó señalando que la ordenación urbanística que se plantea en este nuevo documento "da respuesta a las necesidades de los zamoranos y apuesta firmemente por el progreso, el crecimiento y la mejora de la calidad de vida de la ciudad".

Señaló que el nuevo plan habilita suelo para el crecimiento industrial, tecnológico y empresarial, apuesta por el incremento de población, amplía de forma importante los espacios verdes y la reserva de suelo para nuevos servicios, compacta la ciudad y diseña una red de comunicaciones urbanas que garantizan la movilidad con criterios de sostenibilidad.

Feliciano Fernández mostró su confianza en que el PGOU obtenga el apoyo de los concejales de ADEIZA, que son necesarios para sacar adelante el proyecto con mayoría absoluta. Señaló que en todos estos meses se ha estado negociando con los independientes, algo que no ha sido posible con los otros dos grupos de la oposición, PSOE e IU, ante quienes se han encontrado, dijo, "con un muro".

El portavoz de Adeiza, Miguel Ángel Mateos, no desveló hoy si el grupo dará su apoyo al PP para aprobar el PGOU y reiteró que está condicionado a que el equipo de gobierno y la Junta de Castilla y León garanticen de manera suficiente las condiciones necesarias para la implantación en Zamora del instituto universitario vinculado a la Fundación Ortega y Gasset.