Palma acoge la II Diada internacional del comercio justo con la participación de productores latinoamericanos

Palma acoge la II Diada internacional del comercio justo en la que diferentes ONG venden productos solidarios con la finalidad de ayudar a los países productores en vías de desarrollo y que, además, este año cuenta con la participación de productores latinoamericanos que forman parte de la Red Mundial del Comercio Justo.

Al acto de inauguración de esta feria, que se ha ubicado en la plaza de España, asistieron la consellera de Asuntos Sociales, Promoción e Inmigración, Fina Santiago; el director general de Cooperación, Josep Ramon Balanzat, así como representantes de las diferentes ONGs participantes, tales como Treball Solidari, Cáritas Mallorca, Unicef, la Fundación Vicente Ferrer y la Red Interdiocesana de Comercio Justo, entre otras.

Santiago indicó que "este tipo de comercio, además de ser solidario, es libre porque pretende establecer una relación de igual a igual para que los beneficios sean compartidos, el consumidor tiene unos productos de calidad y el productor pone unos buenos precios y sin explotación".

"No hay explotación infantil, no hay intermediarios, se respeta el medio ambiente y se trabaja desde la perspectiva de género, por lo que es un tipo de comercio que cualquier persona de las islas debería conocer".

Asimismo, destacó la importancia de que los países en vías de desarrollo establezcan unas redes comerciales estables porque "en todos los países ya desarrollados el comercio tiene una importancia capital".

Uno de los productores de la Organización Red Latinoamericana de Comercialización Comunitaria (Relacc), que participa en la Red Mundial de Comercio Justo y que ha acudido a la feria palmesana, Rubén Tapia, indicó que la finalidad de estas iniciativas es "buscar nexos" para que "la gente sencilla de estos países puedan acceder al mercado laboral en condiciones más justas y más equitativas".

El productor explicó que la Relacc está presente en toda Latinoamérica y trabaja con pequeños productores de distintos tipos, tales como de alimentarios, textiles o cerámica, para organizarlos para que puedan "presentar unos productos de calidad en volumen".

"No se trata de un comercio cualquiera, sino de valorizar a la persona humana en armonía con el ambiente para poder estar en el mercado con precios justos, con buena calidad y con mucha calidez, que es lo que nos diferencia", subrayó.

Rubén Tapia comentó que la Organización Mundial del Comercio Justo está integrada por más 350 entidades de todo el mundo y que en ella participan más de 3.000 pequeñas organizaciones latinoamericanas que "trabajan y desarrollan la comercialización de sus productos y que plantean un nuevo modelo de economía social y solidaria".

La representante de Cáritas Mallorca Paola Madoni señaló que este evento es "una oportunidad para sensibilizar a la ciudadanía" y para "establecer un puente de solidaridad con los países en vía de desarrollo". Así, agregó que "es una forma de llegar a estos países y de reactivar sus economías para reducir la desigualdad entre las sociedades y lograr que exista un mismo mundo".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento