El silencio del presidente del PP, Mariano Rajoy, tras el levantamiento parcial del secreto de sumario del 'caso Gürtel' continúa generando polémica. Mientras la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha vuelto a pedir este miércoles "claridad y contundencia" al líder del PP, la portavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, Soraya Sáenz de Santamaría, ha negado que se esté produciendo "ningún silencio" frente a la implicación en el casode Luis Bárcenas, que ha solicitado la baja temporal como militante del PP y ha dejado definitivamente sus funciones como tesorero del partido. Está previsto que Rajoy participe este miércoles en Sevilla en la conmemoración de la composición del primer equipo del ex presidente José María Aznar al frente de los populares. La expectación es máxima ante la posibilidad de que el silencio se rompa.

"La corrupción no debe estar jamás amparada por el silencio", ha asegurado la vicepresidenta del Gobierno, tras las palabras de Sáenz de Santamaría, que ha defendido que el partido no adopte nuevas medidas respecto a él hasta que no haya "plena constancia de hechos acreditados" por el tribunal.

La portavoz 'popular' en el Congreso señaló asimismo que no cabe hablar de "silencio" de Rajoy o de la dirección del PP porque ya se pronunciaron en la última reunión del Comité Ejecutivo Nacional, "que es el órgano del partido donde corresponde hablar de estos asuntos y donde Rajoy y el resto de los miembros mantuvimos nuestra línea de actuación, sacando de los cargos ejecutivos a aquellas personas que podían estar incursos en esos procedimientos", ya que señaló que "somos los primeros interesados en que en nuestras filas no haya casos de esta naturaleza".

"Somos los más interesados en adoptar medidas frente a aquellos que utilicen al partido para enriquecerse porque perjudican a la honestidad y honradez de los miles de militantes y dirigentes que hacen bien su trabajo, pero nos tenemos que atener a nuestras propias normas", indicó la portavoz del PP en el Congreso.

Cestionada por si pondría la mano en el fuego por la actuación del ex tesorero del PP, la portavoz del PP aseguró que "la presunción de inocencia que recoge nuestra Constitución permite a cualquier español no tener que poner la mano en el fuego por otro, son los tribunales los que tienen que decidir y resolver". "Yo no soy el juez de nadie", concluyó.