En un comunicado, EA indicó que el sumario, iniciado en 2002, "irrumpe en un panorama político con evidentes signos de cambio y en el que están abiertas las vías para lograr la normalización de Euskal Herria".

La secretaria de Comunicación de Eusko Alkartasuna, Ikerne Badiola, subrayó que su formación está "convencida de que sólo el diálogo y la actividad política pueden llevarnos al nuevo escenario que la sociedad vasca demanda". En este sentido, criticó que "pedir penas de cárcel para personas que han mostrado su apuesta las vías democráticas y democráticas, entorpece las posibilidades de consolidar un cambio en el escenario político vasco".

Badiola destacó que "el Estado pretende anular cualquier apuesta de vía política que surja en el seno de la izquierda abertzale, y así imposibilitar una solución definitiva al conflicto político". "Bajo la falsa premisa de 'todo es ETA', el Estado parece decidido a caminar por una vía de tremenda irresponsabilidad, por cuanto pone palos en las ruedas del camino hacia la normalización", agregó.

Por último, advirtió de que las actuaciones procedentes de cualquier instancia del Estado español no impedirán que Eusko Alkartasuna "redoble los esfuerzos" por acordar una serie de mínimos con todas las fuerzas abertzales, con el fin de lograr la puesta en marcha de un movimiento soberanista "plural y no violento, que sea capaz de superar la actual situación de conflicto político".