En un comunicado conjunto, ambos ayuntamientos argumentaron que el consistorio de Hernani "no respeta los procedimientos legales al invadir las competencias de la Mancomunidad de San Marcos" y afirmaron que la iniciativa de implantar el 'puerta a puerta' "producirá la dilapidación de fondos públicos por la duplicidad de infraestructuras", ya que incumplirá "las reglas de funcionamiento" de la Mancomunidad y "generará un incremento desmesurado del coste de la gestión de residuos" para los municipios recurrentes.

Los Ayuntamientos de Astigarraga y Errenteria consideraron que la presidencia de la Mancomunidad "no está defendiendo los intereses generales de la entidad", ya que, al respaldar la "actuación unilateral" del consistorio de Hernani, "está permitiendo que se socaven las estructuras de gestión de los residuos urbanos" acordadas por todos los ayuntamientos de San Marcos, y que "se incumplan los acuerdos alcanzados por los consistorios en esta materia", denunciaron.

Por ello, solicitaron la suspensión cautelar del acuerdo del Ayuntamiento de Hernani por el que se decidió el reparto de cubos para implantar el sistema de recogida de residuos 'puerta a puerta' en esta localidad.