La sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, también absuelve a otros tres acusados, R.V.O., E.S.Z., y C.A.S., a los que el fiscal les imputó un delito contra la salud pública solicitando para cada uno de ellos ocho años de prisión y multa de 5.000 euros. Sin embargo, condena a G.B.N. a tres años de prisión, seis menos de lo que pidió el fiscal, como autor de un delito de tráfico de drogas.

El juez ha declarado probado que desde finales de año 2001 y primeros meses de 2002 el acusado G.B.N. vino realizando intercambio de sustancias estupefacientes, hachís y cocaína, a cambio de dinero y que esta persona entregó cocaína al guardia civil, J.G.G., que consumía con un grupo de amigos en la finca de uno de ellos, y hachís a los también acusados E.S.Z. y C.A.S.

En el domicilio de G.B.N. fueron hallados una papelina con 0,25 gramos de cocaína con una pureza de al menos el dos por ciento, y tres trozos de hachís con un peso de 2,38 gramos novecientos ochenta y cuatro con treinta y tres gramos de inositol, una balanza con un margen de pesaje de un gramo y hasta tres kilos, diversos envoltorios conteniendo restos de una sustancia blanca.

La sentencia recoge también que en el domicilio de E.S.Z. y C.A.S. fueron encontrados 31,55 gramos de hachís en diversos fragmentos que no consta fueran destinados a su entrega a terceros.

En fecha no determinada, de principios del año 2002, G.B.N. pidió al guardia civil que realizara gestiones porque en una casa del también acusado R.V.O., personas no identificadas habían llevado a cabo la sustracción de un kilo y medio de cocaína, hecho que no está acreditado.

El guardia civil, tras ponerlo en conocimiento del capitán jefe de la compañía de Talavera de la Reina (Toledo), inició una serie de indagaciones, sin la incoación de atestado, en el curso de las cuales solicitó las reseñas que el Cuerpo de Policía Nacional tenía de dos personas que era, según la información recibida por el guardia civil, sospechosos del posible robo. Al juez no le consta que tales indagaciones llegaran a ofrecer resultados positivos.

También en el curso de esta relación G.B.N. pidió al guardia civil que averiguase el estado de los antecedentes de R.V.O., averiguando J.G.G. que sobre él pesaba una requisitoria, información que dio a G.B.N. quien, a su vez, la trasladó a R.V.O. Todos los acusados, salvo R.V.O., eran consumidores de sustancias estupefacientes.