Martín hizo hincapié en las "dificultades y especiales características técnicas" de esta obra, que atraviesa la falda de una montaña, y por cuya solución felicitó tanto al director de la obra, Ramón Díez de Velasco, como a la empresa constructora, Senor.

El consejero mencionó los taludes y un acueducto que ha sido preciso construir para conducir la tubería, señalando que "es una obra ejemplar, digna de ser visitada por los ingenieros de caminos".

Martín añadió que esta obra es el comienzo de otras actuaciones donde se abordará, entre otras, la construcción de una EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales) que hará realidad el saneamiento, y felicitó al alcalde de Vega de Liébana "por impulsar esta iniciativa aunque este tipo de obras no son rentables desde el punto de vista político".

Por su parte, el alcalde, Gregorio Miguel Alonso, agradeció a Martín la colaboración que la Consejería de Medio Ambiente ha prestado al Ayuntamiento, sobre todo en la resolución de la obra cuyo trazado ha evitado "un bombeo que el Ayuntamiento de Vega de Liébana no hubiera podido mantener económicamente".

Esta obra, que forma parte del Plan Integral de Abastecimiento y Saneamiento para el municipio de Vega de Liébana, evitará que las viviendas de la localidad, ubicadas a ambos lados de la carretera hacia Vada, viertan sus aguas residuales al río sin ningún tipo de tratamiento, por medio de un colector.

Dicho colector no tenía los registros necesarios para comprobar el trazado, pendientes o funcionamiento de la red, y efectuar las labores de vigilancia, limpieza y mantenimiento. La obra, inaugurada hoy por Martín, también evitará que las viviendas de la margen derecha del río viertan el agua residual directamente a su cauce.

La actuación también ha supuesto la primera fase de la instalación del emisario general entre La Vega y aguas abajo de la captación del Plan Potes, que servirá como prolongación del punto de vertido de la pequeña EDAR existente en La Vega. Teniendo en cuenta que en la zona de Puente Hinojo se encuentra la ETAP del Plan Liébana, el vertido deberá efectuarse aguas abajo de dicha captación.

La nueva EDAR se construirá en la finca situada antes de la confluencia con el arroyo Tolina. Su ubicación es la más adecuada por su extensión para encajar las instalaciones de depuración que ahora se necesitan para La Vega y las futuras ampliaciones, y por la posibilidad de construir un fácil acceso para su ejecución y mantenimiento.

Desde el punto de vertido, aguas arriba de la confluencia del arroyo Tolina con el río Quiviesa, se ha construido un emisario general, en primera fase, hasta el vertido de la EDAR existente en La Vega.