En el apartado de 'Siderurgia', continúan las conclusiones de las jornadas, se lamenta que no haya apenas capacidad de decisión dentro de la multinacional y se señaló que mientras para Luxemburgo la siderurgia es "estratégica" y por tanto está en el accionariado y en el Consejo de Administración, en España no ocurre lo mismo tras la privatización de Ensidesa. "De cualquier forma, no se puede permitir una merma de los derechos de los trabajadores", dijeron.

En el sector de la Minería se concluye que en España el reto fundamental es solucionar el "importantísimo hándicap" de la contaminación y superar el trámite del nuevo reglamento de ayudas europeas. Señalaron que hace falta además el compromiso de la Administración para superar los problemas actuales. En cuanto al sector naval, expusieron la necesidad de "contratación, financiación y ayuda pública", mayor especialización en la construcción de buques y una "potente" industria auxiliar.

Por lo que se refiere al sector energético, las conclusiones apuestan por potenciar el I+D en las empresas. "Por razones de equilibrio territorial, es necesario aprovechar nuestro potencial y, entre otras cosas, facilitar las conexiones de energía con otros territorios".

También pusieron el acento en la "escasa competitividad" de ramas no industriales que necesitan "reconvertirse", en referencia al comercio y al transporte.

Industria del futuro

Por último, sobre las relaciones laborales en la industria del futuro, las conclusiones de las jornadas señalan que hay una tendencia a la individualización que debe contrarrestarse con una negociación colectiva "más racional" que asegure "dosis razonables" de flexibilidad para que las empresas puedan adaptarse a un entorno cambiante y global, y también una mayor seguridad de los trabajadores.

la patronal (Femetal) se defiende una mayor y mejor formación profesional de los trabajadores (antes y durante la relación laboral), la importancia de primar el esfuerzo de los mejores y de políticas para retener el talento, y una mayor flexibilización del marco jurídico laboral. Todo ello mediante medidas legislativas y recursos públicos acordes con las disponibilidades presupuestarias actuales, sin que se incrementen las cargas que actualmente soportan las empresas.

Para la Administración, el diálogo social juega un papel importante en el contexto actual de crisis económica, ya que su superación pasa por el esfuerzo compartido de todos, y por ello se apela a la responsabilidad de las personas implicadas y por hacer un uso adecuado de los recursos existentes.