La alcaldesa de Girona, Anna Pagans, aseguró que la ciudad presenta a estas horas "una normalidad con excepciones puntuales de paisaje". Afirmó que "todos los barrios están conectados" de nuevo con electricidad aunque reconoció que todavía quedan "algunas colas" sin suministro.

Pagans explicó en rueda de prensa que estas colas son "casos puntuales" que actualmente están recopilando y comunicando a la compañía eléctrica Fecsa Endesa. "La normalidad va existiendo", comentó la alcaldesa, excepto en algunas zonas del valle de Sant Daniel, Campdorà de Dalt, las Pedreres o en las calles Caldes de Montbui y Alfons XII.

La alcaldesa también reconoció que la relación con la compañía eléctrica estos días había sido "correcta y fluida gracias a la insistencia del ayuntamiento". De todos modos reclamó a las eléctricas "un mayor mantenimiento", ya que éste "ayudaría a aguantar más en momentos determinados".

Cuidado con las placas de hielo

Pagans, además, hizo un llamamiento a la ciudadanía para que vaya con cuidado delante de las posibles placas de hielo que ahora pueden ir desprendiéndose de los tejados de los edificios. "Los tejados están llenos de nieve y hay peligro de caída de placas enteras de hielo", explicó.

Por este motivo aconsejó a los ciudadanos que pasen un poco separados de las cornisas para evitar sustos y accidentes. Esta misma tarde, un hombre resultó herido leve en la ciudad por la caída de una de estas placas.

Por otro lado, la alcaldesa aseguró que los trabajos todavía no han acabado. A partir de mañana el ayuntamiento se centrará en la retirada de montones de nieve, de árboles y ramas caídos, y en estudiar cuál ha sido la afectación en los bosques urbanos y qué actuaciones será necesario realizar.

Después de "tres días muy precipitados" el consistorio también elaborará un informe para evaluar el dispositivo de emergencia que se realizó durante la nevada, y analizar así qué cosas será necesario cambiar si la situación se repite en un futuro, concluyó Pagans.