El actor estadounidense Charlie Sheen ha abandonado el rodaje de la serie Two and a Half Men (Dos hombres y medio) para ingresar en un centro de rehabilitación "como medida preventiva", según un comunicado de su publicista, Stan Rosenfield. La nota no especificó cuánto tiempo estará el intérprete alejado de los platós ni las razones por las que ingresa en el centro.

Sheen, de 44 años, fue acusado oficialmente este mes de amenaza, asalto menor, y un delito menor en tercer grado, por haber intimidado con un cuchillo a su esposa el día de Navidad, en Aspen (Colorado). El actor fue arrestado entonces acusado de violencia doméstica después de que la policía recibiera una llamada en el servicio de emergencias.

La prensa estadounidense asegura que Sheen ya ha entrado en centros de rehabilitación al menos en dos ocasiones anteriores, debido a sus problemas con el alcohol y la drogas. Sin embargo una fuente próxima al actor manifestó a la revista especializada People que esta vez la razón tiene más que ver con el episodio de violencia doméstica ocurrido en Navidad.

"Charlie está estrasado. Está cansado. Los niños están en su mente. Brooke está en su mente", afirmó esa fuente. "Tiene muchas cosas en la cabeza (...). Siente que necesitaba escapar de las influencias negativas que hay a su alrededor y despejar su mente, descansar y tomarse un respiro", añadió la fuente.

Sheen está casado con Brooke Mueller, con quien tuvo dos mellizos en marzo de 2009. Según la prensa estadounidense, Mueller está también ingresada en otro centro de rehabilitación, donde se encuentra en compañía de sus dos hijos, tras haber superado recientemente una neumonía. El portal TMZ asegura que en realidad el ingreso de Mueller tiene que ver con el "abuso de sustancias".

La producción de Two and a Half Men será suspendida temporalmente, según un comunicado del canal CBS. "Le deseamos lo mejor mientras hace frente a sus asuntos personales", dijo Warner Bros., productora de la serie.