La media de hogares asegurados en el conjunto de España se sitúa en el 72%, siendo vascos, catalanes y madrileños los más celosos con la seguridad de su hogar –protegen ocho de cada diez–. Por detrás, con índices algo superiores a los de Galicia –67%–, se sitúan las comunidades del centro y del sur de la Península.

La explicación puede estar en la propia realidad geográfica de Galicia. Los municipios de 50.000 a 200.000 habitantes son los que más hogares asegurados poseen. Y en Galicia son los menos.

Los expertos aseguran que esta despreocupación se da «porque no está entre las prioridades de gastos del hogar», afirma el abogado Manuel Torres. Las familias gallegas que tienen su casa asegurada dedican 14 € mensuales de media al pago del seguro del hogar, muy por debajo de otros capítulos domésticos, como la hipoteca, 343 €, o los 33 € para telefonía móvil.

Ante la duda, asegura

«Los seguros más típicos son el de vehículo y el de vida, el de hogar se hace en muchas veces de forma no voluntaria: por la hipoteca de un banco o por la insistencia de un comercial –sentencia Torres–. Hay gente que sólo accede a contratar por si acaso».

Y es que no se ha encontrado todavía vacuna contra los siniestros caseros.

Los accidentes más frecuentes, según el informe del Inade, son los causados por las fugas de agua; detrás vienen rotura de cristales, daños eléctricos, robos, perjuicios causados a terceros o incendios, respectivamente.

Las pólizas contra el fuego son las que les causan menos gasto a las compañías: se producen de forma esporádica donde ya está cubierto.

El seguro de hogar en España ya cubre imprevistos como pérdida de alquiler, cambios de fachada, colisión de vehículos o actos vandálicos. A juicio del Inade, es de las mejores ofertas de Europa.