El pleno del Parlamento sacó hoy adelante una iniciativa a propuesta del PPdeG en la que insta al Gobierno de la Xunta a impulsar el reconocimiento de las competencias profesionales de los trabajadores que adquirieron experiencia laboral.

Además, y tras ser transaccionada con el BNG, los grupos incluyen en la iniciativa la necesidad de que esta acreditación se realice con criterios determinados, como delimitar y establecer los objetivos del sistema de evaluación o integrar el modelo de reconocimiento y acreditación de competencias profesionales que se determinen en el conjunto del sistema gallego de Formación Profesional.

Asimismo, la iniciativa aprobada pide "velar en todo momento" por la implantación de un modelo de evaluación, reconocimiento y acreditación de las competencias profesionales "fiable" en sus procedimientos, dotado de "objetividad y transparencia", así como del rigor técnico necesario.

También aboga por que el reconocimiento de las competencias dé satisfacción a las expectativas personales y sociales de la población, de manera que se "facilite el acceso en igualdad a estos procesos de evaluación, reconocimiento y acreditación de competencias profesionales".

Finalmente, pide "evitar una depreciación" de la educación y formación formal, propiciando la implantación de un modelo de evaluación, reconocimiento y acreditación de las competencias profesionales en el sistema gallego de formación profesional como un elemento "complementario plenamente integrado en el propio sistema". DEBATE

El debate se sustanció a última hora de ayer, pero hasta hoy los parlamentarios 'popular' y nacionalista habían apalabrado negociar la iniciativa para sumar aspectos de la enmienda presentada por el diputado del Bloque Henrique Viéitez.

Durante el debate, Sueiro Pastoriza recordó que más del 60 por ciento de los gallegos tienen experiencia profesional o formación non formal, pero "no disponen de una acreditación" oficial de su competencia, por lo que subrayó la necesidad de convalidar esta condición.

Asimismo, incidió en que las previsiones para 2020, del total de puestos de trabajo que se crearán, sólo el 10 por ciento serán para bajas cualificaciones y avisó de que el 70 por ciento de los parados sólo cuentan con Bachillerato y ESO.

Sin embargo, el parlamentario socialista José Tomé Roca advirtió de que el gobierno bipartito ya había iniciado este proceso y recriminó que el actual ejecutivo "lo que hizo fue quitarles la posibilidad de acreditar" sus competencias a los trabajadores el pasado año, al no convocar el proceso para hacerlo. "Les hicieron perder un año", echó en cara.

Por su parte, el nacionalista Henrique Viéitez defendió la necesidad de establecer un modelo "accesible, eficaz y eficiente" y definir las convocatorias o el número de trabajadores que pueden acceder con el objetivo de "dar cumplida respuesta a la demanda". FERROL-BARREIROS

Por otro lado, los votos del PPdeG echaron abajo hoy una iniciativa impulsada por el diputado socialista Pablo López Vidal para establecer un cronograma con plazos y consignaciones presupuestarias suficientes para acabar todos los tramos de la vía de alta capacidad entre Barreiros y Ferrol en 2014 y que finalmente fue trasaccionada con el BNG para impulsar un acuerdo con el Ministerio de Fomento.

Sin embargo, en su intervención durante la sesión que se celebra hasta hoy en la Cámara autonómica, el 'popular' Alejandro Gómez Alonso defendió que la Xunta ya ha establecido un calendario "serio, creíble y ejecutable" para llevar a cabo esta obra, por lo que reivindicó que el PP seguirá con "la conciencia tranquila". "¡Ya lo tienen!", exhortó el parlamentario del grupo mayoritario.

Por contra, el socialista Pablo López Vidal calificó de "ultraje" a la costa del norte de Lugo la acción del Gobierno con esta zona y contrapuso el compromiso del Ministerio de Fomento para finalizar en 2014 la parte de la obra que le corresponde a este departamento frente a la Xunta. Además, la nacionalista Teresa Táboas lamentó que el Gobierno gallego actúe "corto de miras" con esta obra y reclamó volver al compromiso de finalizar la obra gallega en 2013.