La Xunta propone dos años para adaptar el planeamiento municipal al Plan del Litoral, aunque consultará si es "viable"

Levantará el veto a construir en al menos 1.000 hectáreas de suelo urbanizable de las más de 85.000 que abarcaba la franja de 500 metros

El conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, Agustín Hernández, explicó hoy que el Plan de Ordenación del Litoral establece dos años para que los ayuntamientos adapten su planeamiento urbanístico, aunque indicó que consultará a la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) para que los tiempos sean "viables".

Así, en un encuentro con los medios, Hernández expuso que tiene "bastantes esperanzas" de consensuar con la Fegamp unos "plazos razonables" para que los planes municipales respeten estas directrices. Por su parte, el director xeral de Sostibilidade e Paisaxe, Manuel Borobio, consideró que el impacto para los ayuntamientos "es menor de lo que se puede suponer".

Se trata de hacer, a su juicio, ajustes "menores" que "no deberían interferir en el plazo" para aprobar los instrumentos de ordenación municipales, por lo que "bajo ningún concepto" tendría que provocar un retraso en los trámites. Además, indicó que toda la información que la Xunta ha recopilado para elaborar el Plan del Litoral se pondrá "a disposición" de los ayuntamientos.

El conselleiro manifestó también su confianza en que en los dos meses (entre enero y marzo) de audiencia a los municipios serán suficientes para poner a punto con los ayuntamientos el segundo texto del plan, de modo que reciba la aprobación inicial en mayo, al tiempo que finaliza —el 17 de mayo— la moratoria de la ley de 500 metros, aprobada por el anterior Gobierno gallego y prorrogada a la llegada del actual Ejecutivo. "Tiene que dar tiempo", zanjó.

Con el levantamiento del veto a la construcción en los 500 metros más próximos a la línea de playa (para lo que se usarán mecanismos "similares" a cuando los ayuntamientos tramitan sus planes), quedarán disponibles para este fin, al menos, 1.000 hectáreas de terrenos urbanos no consolidados y de suelos urbanizables dentro de esta franja, que abarca más de 85.000 hectáreas en total. Para estos terrenos que tienen la calificación para que se inicien construcciones el plan sólo fija la ordenación, que corresponde a los ayuntamientos.

Zonas de mejora

Además, en otras 1.882 hectáreas —incluidas en zona de mejora ambiental y paisajística— se podrán levantar edificios si se cumplen determinados criterios, que van en el sentido de dar "soluciones de continuidad a los núcleos", es decir, en casos en que haya un grupo de construcciones o esté cercanas a alguna localidad. "En ningún caso serán urbanizaciones aisladas", afirmó Borobio, que indicó que, de cualquier forma, las áreas de recalificación las deberá delimitar el ayuntamiento.

El Plan del Litoral establece criterios para todas las franjas de protección que se diferencian, aunque no es de aplicación en suelos urbanos consolidados, pero los casos se estudiarán individualmente para decidir "cómo se aplican", en especial, en el caso de estas construcciones con restricciones.

El documento elaborado por la Xunta impide que se construya en más de 1.200 hectáreas por debajo de los 500 metros, así como en 1.740 que están más allá de esa franja —entre unas y otras suman 2.950 hectáreas—. Los territorios marcados como de mejora ambiental y paisajística a uno y otro lado de esa línea superan las 3.064 hectáreas.

Audiencia a los ayuntamientos

El titular de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas destacó que en los dos próximos meses se repetirán las audiencias y los trabajos que ya se hicieron previamente con los 84 ayuntamientos litorales y señaló que está "seguro" de que habrá "mayor implicación". "El documento se va a enriquecer mucho en estos dos meses", aseguró, por lo que cree que el trámite posterior de información pública (previsto para junio y julio) "no tendrá muchos problemas".

Hernández destacó que los trabajos comenzaron en noviembre de 2008 y que, en esta legislatura, se mantuvo el mismo equipo y se reforzó. En paralelo, dijo, estos profesionales trabajan también en las Directrices de Ordenación del Territorio (DOT), que la Xunta prevé aprobar a finales de año, al mismo tiempo que el Plan del Litoral.

Preguntado acerca de si existen cálculos acerca de cuántas serán las hectáreas en las que se levante la prohibición de construir, al dejar se aplicarse la ley de 500 metros, los responsables de la consellería indicaron que todavía no disponen de cifras e insistieron en que habrá que analizar "caso por caso".

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