El presidente de la DPT, Antonio Arrufat, explicó en la rueda de prensa anterior al Pleno que se trata de unos presupuestos de "marcado carácter municipalista", al remarcar que "no dejamos de lado el apoyo a los Ayuntamientos".

Además, aseguró que el presupuesto se ha elaborado "con los pies en el suelo y con un fin fundamental: recortar gasto y recuperar dinero para que al final lleguemos a los Ayuntamientos con la cantidad más elevada posible y lo más próxima al año que estamos".

Por su parte, el vicepresidente de la institución provincial, Inocencio Martínez, explicó que aún "estamos depurando una serie de planes de años anteriores que va a incrementar el presupuesto de Planes provinciales cuando llegue el momento". Por eso, dijo que es un presupuesto "austero, riguroso y realista".

Arrufat destacó la negociación que ha habido con el resto de los grupos en la que se aprobaron un total de 17 enmiendas de la oposición, mientras que Martínez apuntó que "se han aceptado las enmiendas que se podían aceptar porque otras no eran lógicas".

Presupuesto "de mínimos"

Aún así, los partidos de la oposición votaron en contra de los presupuestos. El portavoz del Partido Popular en materia económica, Carlos Clavero, basó su rechazo en que el gasto corriente "no se reduce tanto como nos dice el equipo de gobierno".

Además, aseguró que "es un presupuesto de mínimos, menos inversor, menos municipalista", en el que "no se nos han aceptado las enmiendas y es un presupuesto peor para los municipios y más ante la situación de crisis en la que estamos".

Para la portavoz de IU, Ana Cristina Pérez, "no se nos ha tenido en cuenta" puesto que se añadieron muy pocas de las enmiendas que presentaron y que iban dirigidas a "un mayor control y supresión del gasto corriente". Por este motivo su voto también fuera contrario a las cuentas públicas de 2010.

Finalmente, el portavoz de CHA, José Navarro, criticó la importante reducción que sufren los Planes de Ayuda a Equipamientos Municipales que bajan casi 5,5 millones de euros respecto del año pasado y que rondarán los 870.000 euros. A su juicio, "es motivo más que suficiente para no apoyarlos porque una de las funciones principales de la Diputación es ayudar a los municipios".

Además, señaló que la Diputación se encarga de competencias que no le son propias, por lo que pidió que dejen de prestarse esos servicios para que los asuman las Administraciones verdaderamente competentes. El equipo de gobierno aseguró que ese proceso ya se ha comenzado en el presupuesto que hoy se aprobó, aunque deberá hacerse de forma paulatina.