El Consejo de Gobierno cerró ayer el anteproyecto del presupuesto del Principado para 2010 que fija su cuantía global en 4.428 millones, un 0,77 % más que este año, de los que el 67%, 3.100 millones, se destinarán a gasto social, un 2,5% más que en el ejercicio actual. Las cuentas regionales para el año que viene suponen un gasto de 4.081 euros por asturiano, 11 más que los destinados este año. El consejero de Economía y Hacienda, Jaime Rabanal, aseguró ayer que el proyecto de ley se aprobará definitivamente el próximo lunes y «uno o dos días después» se trasladará al Parlamento regional para su tramitación.

Rabanal ha destacado la «extraordinaria complejidad» que ha supuesto la elaboración de este presupuesto y ha asegurado que éstas son «las cuentas que necesita Asturias para salir de la crisis» dado el esfuerzo inversor que representan, con más de 1.280 millones de euros. También ha explicado que se recurre al límite de la deuda que permite el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), el 2,75 del PIB regional, lo que equivale a 633 millones de euros y ha subrayado que Asturias «puede permitírselo porque parte de una situación financiera sólida y saneada».

Otra de las prioridades con las que ha trabajado el Gobierno para elaborar las cuentas del próximo año ha sido la de primar la «austeridad».Los ajustes permitirán sustraer entre 40 y 50 millones de los gastos generales de funcionamiento de las consejerías para dedicarlos a inversiones o prestación de servicios. El presupuesto de todas las consejerías se reduce salvo en los casos de Salud y Servicios Sanitarios y Vivienda y Bienestar Social, pero ha garantizado la prestación de los servicios esenciales.