El padre de los bebés mellizos presuntamente maltratados, uno de los cuales falleció el pasado sábado, tiene antecedentes por diversos delitos, el último de ellos por malos tratos y amenazas, según informó la Policía Local de Málaga.

A este joven de 23 años y nacionalidad rusa, S.M., que se encuentra en prisión preventiva desde el pasado sábado, junto a la madre de los menores, O.N., nacida en Ucrania y de 20 años, ambos domiciliados en Benalmádena (Málaga), le constan hasta cuatro detenciones previas por diversos delitos como el de hurto o malos tratos y amenazas en junio de 2006.

Esta pareja fue detenida en la tarde del pasado jueves por agentes del Grupo de Escoltas, Menores y Atención Ciudadana (Gemac) de la Policía Local de Málaga como presuntos autores, en un principio, de un delito de malos tratos y abandono de menores.

Maltrato y desnutrición

Según explicó la Policía Local en un comunicado, el pasado jueves se activó desde el Hospital Materno Infantil de Málaga el protocolo habitual para los casos de malos tratos, avisando de que estaban atendiendo a un bebé de dos meses y medio con síntomas de haber sido víctima de malos tratos físicos, así como de desnutrición.

Una dotación policial se personó en el hospital, entrevistándose con un facultativo, tras lo que se dirigieron a la sala de espera, donde localizaron a los padres del bebé, procediendo a su identificación y comprobando que la madre tenía a otro pequeño en sus brazos, concretamente el hermano mellizo del que era atendido en el centro.

Preguntados por las lesiones del bebé, los padres manifestaron a los policías que habían dejado a los dos menores la noche antes con una niñera para poder ir a la discoteca, ofreciendo "numerosas incoherencias" en sus declaraciones, por lo que los agentes decidieron entregar el segundo pequeño al pediatra de guardia con el fin de que fuese observado ante la posibilidad de que también hubiera podido sufrir malos tratos.

Versión de los progenitores

Tras los correspondientes exámenes, se constató que también sufría múltiples politraumatismos y lesiones, a pesar de lo cual los padres no habían solicitado asistencia médica para el mismo.

Desde la Policía Local se informó de los hechos al Servicio de Protección de Menores de la Junta de Andalucía, que decretó el desamparo provisional el bebé y asumió su tutela.

Finalmente, el juez decretó el ingreso en prisión de los padres, imputándoles los delitos de lesiones agravadas y homicidio. Por su parte, el bebé que permanece ingresado en el Materno Infantil se encuentra estable y continúa en planta.