Los trabajadores de la planta Opel de Figueruelas pueden acogerse ya al cuarto expediente de regulación de empleo (ERE) que afronta la fábrica en sólo un año. El jueves se firmó el acuerdo para esta nueva medida, que se acometerá en principio con bajas voluntarias y muy flexibles que además contarán con un plus de 3.000 euros.

El objetivo es adaptar la producción de la planta al brusco descenso en la demanda de coches que se viene registrando durante el último año. La empresa alega que la situación no ha mejorado y que "es imposible poner en marcha la línea del Opel Meriva en el turno de noche como está previsto", asegura. Actualmente, la fábrica está produciendo unas 1.800 unidades al día, frente a las 2.150 que tiene de capacidad máxima en sus tres turnos, de mañana, tarde y noche.

El cuarto ERE empezará a aplicarse el 1 de noviembre, enlazando con la finalización del primero (que se empezó a hacer a finales del año pasado), y durará hasta el 31 de marzo de 2010, para cuando está prevista la producción del nuevo Meriva.

El ERE se tratará de hacer en su mayoría con bajas voluntarias, empezando por dar la opción de renovar su situación a los trabajadores que se acogieron al primer expediente (y que tendrían que reincorporarse al trabajo el 1 de noviembre). En esta situación se encuentran en torno a 320 trabajadores, a los que se enviará una carta para explicarles la situación.

A partir de entonces, el resto de trabajadores podrá presentarse voluntario y las bajas que sigan quedando libres tras este proceso hasta completar las 600 que requiere el ERE se harán rotando entre el resto del personal de manufactura.