Este miércoles ha empezado a patrullar en el Puerto de Barcelona la Policía Marítima de los Mossos d'Esquadra. Lo hará con 16 agentes, entre mandos y agentes, y cuatro embarcaciones, una de ellas una moto de agua.
La de Barcelona se suma a las bases que la Policía Marítima ha desplegado los últimos años en Palamós, Vilanova i la Geltrú y l'Ametlla de Mar.
El Director General de la Policía, Pere Ferrer, ha explicado que la celebración de la Copa América ha acelerado la llegada a Barcelona de la Policía Marítima, que hasta la celebración del acontecimiento deportivo se dedicará a acompañar a los equipos participantes durante los entrenamientos en la salida y entrada del puerto.
La puesta en marcha de la base de la Policía Marítima al Puerto de Barcelona ha contado con la asistencia del director general de la Policía, Pere Ferrer, y el mayor de los Mossos, Eduard Sallent, que han querido saludar a los nuevos agentes y conocer las embarcaciones con que prestarán los servicios.
La Policía Marítima de los Mossos d'Esquadra ha iniciado su despliegue en el Puerto de Barcelona con el objetivo de dar seguridad en el espacio marítimo y portuario. Empezará a patrullar por la lámina de agua del Puerto de Barcelona y las aguas marítimas próximas, coincidiendo con las necesidades de seguridad vinculadas a los primeros entrenamientos de equipos participantes en la 37.ª Copa América de vela que se tiene que celebrar.
Las competencias policiales que asumirán serán las funciones propias de los Mossos d'Esquadra en aguas interiores, y por tanto, se proyectarán en la totalidad de la zona de servicio del Puerto de Barcelona así como en las aguas interiores marítimas, delimitadas conforme a lo establecido en la normativa sectorial vigente. En este sentido, Pere Ferrer ha dejado claro que las funciones de la Policía Marítima están pactadas con el Ministerio de Interior y que se llevarán a cabo siempre con la máxima colaboración con el resto de agentes implicados en la seguridad marítima.
Más allá de los servicios habituales, la Policía Marítima también hará las tareas propias de proximidad que corresponden a la PG-ME con las diferentes cofradías, asociaciones, clubes deportivos y otras entidades vinculadas al Puerto. También, como es habitual, dará el apoyo necesario a las Unidades de Investigación del territorio en la lucha contra el tráfico de marihuana y de hachís vinculado a organizaciones criminales que operan en nuestro territorio.
“Es un día importante porque el Puerto de Barcelona, pero también la ciudad de Barcelona, ganan 16 agentes para mejorar la seguridad tanto en la parte comercial del puerto como en la parte más turística, siguiendo el modelo de proximidad y de colaboración con el resto de agentes”, ha añadido Ferrer.
Los agentes, en esta primera fase, cubrirán un turno que irá desde las 07:00 de la mañana y hasta las 23:00 horas aproximadamente, a pesar de que en un futuro próximo se cubrirán las 24 horas diarias.
Este nuevo despliegue se añade al ya existente en otras zonas del litoral. Los puertos de Palamós, Vilanova i la Geltrú y l'Ametlla de Mar cuentan con bases náuticas desde donde la Policía Marítima opera en toda la costa catalana. Operar desde Barcelona permitirá a la Policía Marítima tener un acceso más rápido a las zonas sur y norte de Barcelona.
El año pasado, la Policía Marítima de los Mossos d'Esquadra hizo 3372 horas de patrullaje, 43 inspecciones a centros de alquiler de embarcaciones y establecimientos relacionados con el ámbito marítimo, 12 dispositivos de investigación y localización de personas en el medio acuático y 110 servicios planificados de protección y cobertura de acontecimientos marítimos, como pruebas deportivas, regatas o travesías, entre otros.
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