Condenan a 80 latigazos un hombre por acusar a su exmujer de adulterio para no admitir la paternidad de su hija en Pakistán

  • El juez ha indicado que está "totalmente claro" que el acusado es "un mentiroso" y que se inventó la acusación.
  • En caso de ser ratificada, sería la primera sentencia a un castigo físico en el país en las últimas décadas.
Mujeres con burka hacen cola para obtener comida durante el Ramadan en Peshawar, Pakistan.
Mujeres hacen cola para obtener comida en Peshawar, Pakistán.
EFE/EPA/ARSHAD ARBAB
Mujeres con burka hacen cola para obtener comida durante el Ramadan en Peshawar, Pakistan.

Un tribunal de Pakistán ha condenado este lunes a un hombre a recibir 80 latigazos por negarse a admitir la paternidad de su hija y acusar falsamente a su exmujer de adulterio tras rechazar el pago de la manutención de la niña desde su nacimiento en diciembre de 2015.

El juez Shehnaz Bohyo ha indicado en su veredicto que "está totalmente claro que el acusado es un mentiroso y que se inventó la acusación", por lo que "es condenado a 80 latigazos", tal y como ha recogido el diario paquistaní Dawn.

"Como el acusado es sentenciado sólo a recibir latigazos, sigue en libertad bajo fianza si acepta comparecer en el lugar y momento designado por este tribunal para ejecutar el castigo", ha manifestado Bohyo antes de explicar que la fianza es de 100.000 rupias paquistaníes (alrededor de 330 euros).

La acusó de adulterio para no pagar la manutención

La antigua esposa del acusado presentó una denuncia en la que explicó que el matrimonio tuvo lugar en febrero de 2015 y que la pareja vivió junta durante un mes. En diciembre de ese año, dio a luz a una niña, pero el hombre se negó a reconocer que era suya y la acusó de adulterio como argumento para no pagar la manutención.

De hecho, el hombre pidió una prueba de ADN, que posteriormente retiró, y sostuvo durante el juicio que realmente vivieron juntos durante seis horas tras el matrimonio y que posteriormente su esposa abandonó la vivienda, a la que no regresó. El tribunal ha recalcado que no hay pruebas ni testigos que lo corroboren.

La fiscal Saira Bano ha relatado en declaraciones al citado diario paquistaní que es la primera sentencia de este tipo en sus catorce años en el cargo y ha afirmado que, en caso de ser ratificada, sería la primera sentencia a un castigo físico en el país en las últimas décadas.

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