Las monas de Pascua de este año en Cataluña las encabezan tres protagonistas muy mediáticas en la actualidad. Por segundo año consecutivo, la jugadora azulgrana Aitana Bonmatí vuelve a presidir el ránking de las monas más solicitadas en las pastelerías. Barbie, tampoco se queda atrás, ni Mia, la figura de chocolate que pretende despertar vocaciones científicas entre los niños.
Esta fue creada en 2023 por la Universidad de Barcelona (UB) y el Gremio de Pastelería de Barcelona para promover y divulgar la ciencia entre los menores. Así pues, cada año, Mia se dedica a una disciplina diferente. El año pasado fue geóloga y, este 2024, la mona educativa por excelencia, se convierte en bióloga.
Mia va acompañada de un código QR de chocolate para que los pequeños, antes de comérsela, puedan entrar a una página web sobre biología y conocer algunos de los conceptos más importantes de esta disciplina.
Entre las tendencias de este año, también destaca Barbie, quien no podía faltar en el podium después del éxito mundial de la película. Desde Natcha pastelería-bombonería aseguran que las monas de este personaje son las que más se agotan "cada día".
Así es el caso también de las de la futbolista catalana, Aitana Bonmatí, que seguirá coronando este 2024 muchas más monas de Pascua. Los clásicos de Disney, los Pokemons o los unicornios, asimismo, continuarán siendo protagonistas este año.
Desde Natcha aseguran que el futbol está presente en cada Pascua y que, como siempre, "el Barça, nunca puede faltar". Asimismo, recuerdan que los clientes pueden elegir entre más de 120 piezas, por lo que la variedad, en este establecimiento, "no falta".
Se mantienen los precios de las monas
Pese a que el cacao se ha encarecido en los mercados internacionales, desde el Gremio aseguran que esta Pascua, al menos, los precios de las monas seguirán similares a los del año pasado.
El presidente del Gremio, Antoni Bellart, reivindica que cuando se compra una mona artesana, también se compra “una pequeña obra de arte, creada una a una y, además, elaborada con chocolate de primera calidad.”
La ‘mona de autor’ frente a las de personajes mediáticos
Si el año pasado las previsiones estaban en vender más de 700.000 monas artesanas en Cataluña, las expectativas en este 2024 son superiores. Desde el Gremio aseguran que la idea es vender cerca de 800.000, así como ampliar las creaciones originales de los pasteleros artesanos, más allá de los personajes mediáticos que este año protagonizan muchos pasteles.
Desde el Gremio aseguran que esperan crear todo tipo de animales y de todas las medidas y colores, desde dinosaurios y leones a elefantes, cochinillos, pingüinos y loros y, por supuesto, el animal por excelencia de esta época: el conejo de Pascua. El sector también busca innovar en su trabajo artístico. Por ello, este año, las creaciones también se basarán en objetos, como bolsos o zapatillas deportivas.
La novedad supera a la tradición
La historia
La existencia de la mona como pastel tradicional del día de Pascua está documentada desde el siglo XV y su nombre procedería de ‘munna’, término árabe que significa "provisión de la boca". Al parecer, en un inicio, se hacía con pasta de pan como base, tenía forma de roscón y simbolizaba que la Cuaresma y sus abstinencias habían acabado. Más adelante, se empezaron a poner encima huevos duros pintados.
En el siglo XIX, se empezó a hacer la mona actual, con una base de bizcocho, mantequilla y chocolate, y adornada con figuras de chocolate, fruta confitada y plumas. En los años 30, de la mano del pastelero Lluís Santapau, se extendió también la tradición de modelar únicamente grandes siluetas de chocolate, y pastelerías de todo el país empezaron a exponer sus creaciones en los escaparates.
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