El runrún con cada nuevo dato que se conoce sobre la polémica que rodea los últimos meses de Kate Middleton se hace cada vez más patente en las redes sociales, afectando por supuesto a más personas. No es solo que, de una forma u otra, estén implicados o salpicados todos los miembros principales de la familia real británica, sino ahora, también, sus imitadores.
Heidi Agan, una de las imitadoras más populares de la princesa de Gales en el Reino Unido, ha sido una de las últimas afectadas. Su nombre se estab repitiendo entre los usuarios, que elucubraban si no sería ella quien aparecía en el famoso vídeo recientemente publicado en el que, en teoría, aparecía Kate acompañando a su marido, el príncipe Guillermo de Inglaterra, de compras.
La idea de la futura reina consorte y de Buckingham Palace de no aparecer en público después de su cirugía abdominal a mediados de enero, sumado al chapucero uso de Photoshop en la ya célebre fotografía por el Día de la Madre anglosajón han avivado teorías como que era ella quien estaba interpretando a Kate en las neuvas imágenes.
Pero ahora Heidi Agan ha decidio romper su silencio y explicar, coartada mediante, que no podía ser ella. En una conversación con el portal de noticias TMZ, la imitadora ha dado a conocer que en el momento en que se grabó aquel vídeo, el pasado sábado, ella se encontraba trabajando en la oficina de una escuela de danza en Northamptonshire, a unos 130 kilómetros de Windsor Farm Shop, donde fueron los príncipes.
Admite Agan, eso sí, que no le ha sorprendido la aparición de su nombre en redes, dado que recientemente fue confundida con Kate Middleton en la calle, volviéndose toda esta una vorágine ya que la gente se pensaba que la desaparecida princesa había aparecido. Ella, eso sí, cree al cien por cien que quien aparece en el vídeo es la auténtica Kate.
Aun así, la doble profesional ha continuado su explicación asegurando que últimamente está más ocupada que nunca y que tiene muchas solicitudes de trabajo y de entrevistas aunque, con respecto a su opinión real sobre lo que está sucediendo, considera que las especulaciones están yendo demasiado lejos, simpatizando con la princesa.
A título personal, ha querido puntualizar que cree que Kate en realidad está bien y que sencillamente se está recuperando de su operación, tal y como dio a conocer la monarquía británica. Además, ha añadido que si bien la esposa del príncipe heredero es una figura pública, también tiene derecho a la intimidad y, sobre todo, a la privacidad en lo que respecta a sus registros médicos.
Por último, ha querido romper una lanza en favor de la corona británica, señalando que aunque la posible falta de información sea caldo de cultivo para teorías conspiranoicas en las redes, no puede decirse que desde la familia real británica sean herméticos, habida cuenta de lo rápido que dieron a conocer el cáncer del rey Carlos III de Inglaterra hace apenas dos meses.
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