Brasil ha superado este jueves la barrera del millón de casos de dengue en lo que va de año, un 390% más que en los meses de enero y febrero de 2023, según datos actualizados del Ministerio de Salud. El país ha registrado 207 muertes y otras 687 sospechosas atribuidas a esta enfermedad infecciosa transmitida por un tipo de mosquito y cuya expansión se ha visto favorecida por las altas temperaturas.
Río de Janeiro declaró "el estado de emergencia de salud pública" a principio de mes a vísperas del Carnaval. Además, la alcaldía presentó un plan de contingencia para enfrentar lo que calificó de "epidemia de dengue" que prevé la puesta en marcha de una serie de medidas para evitar la proliferación del mosquito Aedes aegypti, transmisor de la enfermedad.
Con 30.279 casos probables, São Paulo, la mayor ciudad de Sudamérica, ya superó en apenas dos meses el número de casos registrados en todo el año pasado. Pero es en la capital, Brasilia, donde la situación ha alcanzado niveles dramáticos, con 101.772 casos de la enfermedad y 53 muertes hasta este jueves.
Número de vacunas insuficiente
El gobernador del Distrito Federal de Brasilia, Ibaneis Rocha, alertó a finales de la semana pasada que los centros de salud de la capital estaban colapsados y que ni siquiera se había llegado al pico de casos. El sistema público de salud empezó a vacunar este mes contra el dengue a niños y adolescentes de las regiones más afectadas, pero las autoridades han reconocido que el número de dosis disponibles no es suficiente para cubrir a toda la población.
En paralelo a la vacunación, ciudades de todo el país han reforzado la fumigación de calles y los equipos de salud que van casa por casa buscando criaderos del mosquito. Con el aumento de los casos, siete de los 27 estados del país (Acre, Goiás, Minas Gerais, Espirito Santo, Río de Janeiro, Santa Catarina y el Distrito Federal) declararon emergencia de salud pública por dengue.
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