Hace un año, Chiara Ferragni estaba impresionando al mundo en el Festival de Sanremo, en el que participó como presentadora y subió el listón con sus impresionantes vestidos. Ahora, pretende mostrar normalidad en su cuenta de Instagram mientras sigue perdiendo acuerdos comerciales.
La influencer, que aún suma 29 millones de seguidores, lleva desde diciembre involucrada en una gran polémica tras descubrirse que había engañado con una acción publicitaria en la que aseguraba que todos los beneficios de la venta de un Pandoro Balocco diseñado por ella iría destinado a fines benéficos.
El escándalo del pandoro ahora está en manos de la fiscalía de Milán mientras los problemas se siguen acumulando para la creadora de contenido italiana. En los últimos días, una nueva marca ha decidido romper su contrato con ella.
Se trata de Pigma, una empresa de papelería con la que llevaba colaborando con ella desde 2021, creando su propia línea de agendas, cuadernos y más accesorios escolares.
Ahora, su línea ha desaparecido de la página web y la empresa ha anunciado en un comunicado que "su código ético corporativo excluye la colaboración con terceros sancionados por las autoridades competentes por haber incurrido en comportamientos poco éticos, corregir y respetuoso de la ley".
Una decisión que Ferragni no se ha tomado nada bien, ya que, según ha revelado a través de su empresa Fenice, la ha descubierto por redes sociales primero. Por eso, ha anunciado que buscará medidas legales por incumplimiento de contrato.
Han asegurado que se trata de una "interrupción unilateral de las relaciones comerciales" que se ha visto "agravada por la decisión de la empresa de comunicar al público, incluso antes de Fenice, la terminación de la relación social; elección evidentemente instrumental y contraria al deber de buena fe en la ejecución del contrato".
Y lo cierto es que la verdad está de su parte, pues el 23 de diciembre de 2023, el directo de Pigma hablo ante los comedios sobre su colaboración con Chiara y la definió como "rentable y satisfactoria".
En el comunicado, aseguran que también van a empezar a luchar contra otras marcas que han roto sus contratos en los últimos meses, como Coca-Cola o el grupo de moda Safilo, que dejó de vender las gafas de sol de Chiara.
Entre todo este huracán, los medios italianos siguen asegurando que el matrimonio de la empresaria con el rapero Fedez pende de un hilo. Después de recibir críticas por defenderla en diciembre de 2023, su marido no ha vuelto a mostrarse en público o redes sociales con ella.
Hace unos días, durante la celebración de cumpleaños del padre de Fedez, Chiara no aparecía en ninguna de las fotos, saltando las alarmas de que el divorcio es inminente.
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