El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Jorge Rodrigo, ha avanzado este martes que tienen previsto "licitar y adjudicar" las obras de ampliación de la línea 5 (L5) de Metro entre la estación de Alameda de Osuna y el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas a lo largo de este año. Este es el paso previo al inicio de las obras, que el Gobierno regional confía en concluir esta legislatura... aunque la puesta en servicio podría demorarse hasta el año 2028.
Este proyecto es una de las prolongaciones del suburbano madrileño que tiene en marcha el Ejecutivo, junto a las de la L3, la L11 y la futura línea que vertebrará el desarrollo de Madrid Nuevo Norte, así como la construcción de una nueva estación de la L9 en superficie para dar servicio a los barrios de Los Berrocales y Los Ahijones, cuyo diseño se ha licitado recientemente y que también se espera que sea una realidad de aquí a cuatro años.
"Esta ampliación responde a la necesidad de reforzar la conectividad con el aeropuerto que actualmente presta la L8 del suburbano", ha señalado Jorge Rodrigo durante un desayuno informativo organizado por Europa Press. Esta línea es una de las más demandadas por los usuarios, con 17,3 millones de viajeros al año, por lo que habilitar otra 'puerta de entrada' a Barajas desde el centro de la capital a través de la L5 ayudará a descongestionar el trazado que parte de Nuevos Ministerios.
La consejería calcula que necesitará una inversión cercana a los 210 millones de euros para materializar este proyecto, que supondrá un 'estirón' de la red del suburbano madrileño de 1,5 km de longitud. Las vías del metro se llevarán desde el barrio de Alameda de Osuna (distrito de Barajas) hasta las terminales T1-T2-T3 de Barajas, donde se construirá una nueva estación que, además de las puertas de embarque de esta zona del aeropuerto, buscará la conexión con la L8 que finaliza en la T-4.
La ampliación de la L5 es un proyecto que lleva largo tiempo en los despachos del palacio de Maudes, sede de la Consejería de Transportes. Fue a principios de marzo de 2020 cuando el exconsejero Ángel Garrido anunció junto a Ignacio Aguado el inicio de los trámites para conectar el centro de la capital con Barajas "en media hora", una propuesta que Cs incluyó en el programa con el que se presentó a las elecciones en 2019.
Entonces, el horizonte temporal que manejaba el Ejecutivo regional para la puesta en funcionamiento del nuevo trazado era finales de 2024. Pero pocos días después del anuncio estalló la pandemia del coronavirus y no se avanzó en el proyecto, aunque nunca se renunció a él. En 2022, los planes pasaban por iniciar las obras a finales de 2023, aunque las intenciones gubernamentales de nuevo sufrieron un retraso.
El proyecto constructivo de la prolongación se adjudicó hace ahora un año y está próximo a publicarse. El siguiente paso a dar será la licitación de las obras para su posterior adjudicación, dos nuevos hitos del proceso que se llevarán a cabo este 2024, de acuerdo con el consejero de Transportes, para previsiblemente iniciar las obras en 2025, con ese nuevo objetivo temporal de tenerlas listas hacia 2027 o 2028.
Tercer carril de la M-607
En el desayuno informativo que ha protagonizado, Jorge Rodrigo ha aludido a otras novedades en materia de movilidad que se desarrollarán a lo largo de este año. Es el caso del tercer carril de la M-607, otra obra largamente anhelada por los madrileños -sobre todo por los que residen en municipios como Alcobendas, Tres Cantos o Colmenar Viejo- y que lleva varios ejercicios esperando a ser una realidad.
El consejero ha asegurado que las obras para habilitar un carril adicional entre Tres Cantos Norte y la variante sur de Colmenar se iniciarán en unos meses, hacia mitad de este año, con el objetivo de que culminarlas en 2026. Esta intervención contará con un presupuesto de 30 millones de euros y se calcula que beneficiará a unos 62.000 conductores cada día.
Otra de las líneas estratégicas que se está desarrollando en la actualidad alude a la inversión de 221 millones para las carreteras de titularidad autonómica, además de aprobar la primera Estrategia de Seguridad Viaria. En Maudes también tienen la vista puesta en un plan de Carreteras para el periodo 2025-2032 que incluirá una red básica de vías ciclistas.
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