La revista Semana ha recogido las opiniones de algunos medios de prensa europeos sobre el beso entre el nuevo rey de Dinamarca, Federico X, y su esposa, la reina Mary, una de las imágenes más difundidas de la ceremonia de proclamación.
Hay que recordar que Federico viajó en octubre pasado a Madrid para encontrarse con la mexicana Genoveva Casanova, con quien cenó, paseó y en cuya casa pernoctó, según unas imágenes que difundió la revista Lecturas. Mucho se ha especulado sobre esta escapada, que algunos calificaron como una ofensa para Mary y que provocaron un tremendo enfado en ella y en los súbditos del nuevo rey.
De ahí que ese beso, ya convertido en nuevos reyes de Dinamarca haya tenido tanta trascendencia. La prensa británica asegura que el beso protagonizado por la pareja "parecía planificado". De hecho, van más allá: "No fue espontáneo".
En el artículo publicado al uso incluyen incluso la conclusión de la experta en lenguaje corporal, Adrianne Carter, quien se centra en varios puntos que podían parecer irrelevantes. "Federico de Dinamarca le guiña un ojo a Mary, lo que significa que estamos juntos en esto. Él la atrae para darle un beso, lo cual intenta hacer varias veces antes de que realmente suceda. Esto es algo que él ha planeado", analizan en el Daily Mail.
Otros medios, como algunos de Portugal, consideran que el afectuoso gesto de la pareja está hecho con la intención de terminar definitivamente con la sensación de crisis que rodeaba a la pareja desde las fotos de él con Genoveva, al menos en lo que se refiere a imagen pública.
La revista Caras titula: "Los nuevos Reyes de Dinamarca y el beso que acabó con la supuesta crisis". Menciona a Genoveva Casanova y habla de la importancia de estas imágenes tan aplaudidas.
"Por si había dudas, esto es la señal que necesitaban los daneses para dar luz verde a su reinado, el cual se ha anunciado en plena polémica", deslizan. Más cautos han sido en Correio da Manhã, donde solo se refieren a lo sucedido "como un beso apasionado", pero no quieren entrar en valoraciones.
Por último, el semanario alemán Bunte remarca la pregunta que Mary de Dinamarca hizo a Federico justo antes del romántico beso que en cuestión de segundos consiguió copar titulares. La australiana preguntó a su marido "¿Deberíamos hacerlo?".
La respuesta fue tan rápida que en milésimas de segundos se besaron. Todo lo demás ya está en los anales de la historia. "Mientras se besaban un murmullo recorrió la multitud (...) Una escena romántica nunca vista en una ceremonia como esta", apuntan, no sin cierta sorna.
En las redes sociales, aunque hay quien sí le da credibilidad a ese beso, también abundan las opiniones de quienes creen que fue impostado.
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