El delegado municipal de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, visita este lunes el Parque Duque de Ahumada. Un espacio verde del casco histórico de Vicálvaro que salió del taller el pasado mes de diciembre tras mejorar sus accesos y zonas estanciales con una pérgola de 138 metros que le dota de sombra. Cuando se cumplen seis meses del segundo mandato de José Luis Martínez-Almeida, ya son 12 los parques y jardines que el Ayuntamiento de Madrid ha rehabilitado a lo largo y ancho de la capital. 11.6 millones invertidos en sacar brillo y partido a rincones de once distritos, desde el norte del mapa municipal, en Fuencarral-El Pardo, hasta el sur, en Villa de Vallecas o Usera.
La apuesta por los pulmones del municipio se inició en 2019, cuando el PP apeó a la izquierda de Cibeles gracias a un acuerdo con Cs y Vox. Ya acumula 92,3 millones de euros destinados a un total de 100 obras, de las que 80 están finalizadas. Y para el curso que recién amanece, el Área municipal de Medio Ambiente reserva 1.104 millones al mantenimiento y mejora de las zonas verdes, 158 millones más (un 16,7%) de lo que se dedicó en 2023. Entre otras iniciativas, las Cuentas municipales de 2024 contemplan reparar el parque de Canillejas o el de Ayerbe, en el casco antiguo de Barajas.
La Montaña de los Gatos
Uno de los primeros espacios que los madrileños recuperaron tras la confirmación del Gobierno en solitario del PP fue la Montaña de los Gatos. Se trata de un tesoro histórico del parque del Buen Retiro que el rey Fernando VII ordenó construir tras la huida de las tropas napoleónicas, en 1814. Andando el tiempo, el montículo artificial fue invadido por otras fuerzas, las de una colonia de asilvestrados felinos que le otorgaría su popular nombre. Y tras casi 20 años oculto, el Consistorio decidió reformarlo, creando un mirador a 15 metros de altura y una sala de exposiciones, bajo tierra, a los que se accede por la puerta al recinto de la calle O’Donnell, esquina con la Avenida de Menéndez Pelayo.
La reforma, con un presupuesto de 2.135.270 euros, sirvió para solucionar los problemas de filtraciones de agua que motivaron su clausura en 2004, pero también restauró las cascadas y el itinerario interior. Como curiosidad, durante las obras se halló un viaje de agua que conducía a una noria anterior a la construcción del parque y dichos restos arqueológicos han quedado a la vista a través de una pantalla de cristal. Ahora se puede apreciar el sistema que se utilizó en Madrid hasta mediados del siglo XIX para distribuir el agua a través de una gran red de galerías subterráneas.
En el sur: de Carabanchel a Vallecas
En estos primeros compases de legislatura también ha sufrido una metamorfosis el parque de las Cruces de Carabanchel. Por su 40 aniversario, la Corporación realizó una actuación de 2.1 millones, dividida en dos fases, para ampliar sus zonas verdes y estanciales con 268 árboles, casi 24.000 arbustos y 7.000 m² de área con vegetación extra.
Desde hace pocos meses, dos de los lugares más emblemáticos de Usera también lucen como nuevos. Uno es el parque Pradolongo, cuyo proyecto, con 1.145.628 euros invertidos, ha hecho posible crear cinco nuevas áreas dedicadas a la práctica del deporte, a los juegos infantiles y al ejercicio de las personas mayores, al tiempo que ha renovado el alumbrado, la red de riego, los accesos o el mobiliario urbano. Otro es el Parque Olof Palme, al que ha ido a parar 618.330 euros, a embellecer el entorno del anfiteatro y la plantación de 34 árboles y 2.217 arbustos.
Varios jardines más del sur se han hecho un 'lifting' en lo que va de mandato. Es el caso del Parque de las Cataratas, en Villa de Vallecas, con una inversión de 407.427 euros. O el del Parque de Aluche, en Latina, cuyas actuaciones han tenido un coste de 570.101 euros. En puente de Vallecas, la inversión de 392.000 euros ha permitido la recuperación del Parque Forestal Ronda del Sur.
Parques renovados en el este... y al norte
Los vecinos de los distritos del este han visto también en este arranque de mandato un carrusel de aperturas de parques. Antes del Parque Duque de Ahumada, en Vicálvaro, con un presupuesto final de 568.000 euros, se remató la reforma del Parque Z de Moratalaz (1.278.236 euros), en donde se han plantado 76 árboles, más de un centenar de arbustos y se ha realizado una siembra de nuevas praderas sobre 1.430 metros cuadrados.
Mucha polémica suscitó entre los vecinos la obra del parque de Calero, de Ciudad Lineal (861.809 euros), puesto que el Ayuntamiento decidió sustituir grandes parcelas de tierra por adoquín y zahorra para evitar las inundaciones que se generaban cuando llovía mucho. Meses después, se estrenó la zona semiforestal ubicada entre la calle Estocolmo y la M-40 en San Blas-Canillejas, que con una inversión de 1.082.950 euros está dotada de zonas infantiles y de mascotas, para completar la configuración del anillo forestal que representa el Bosque Metropolitano.
Al norte de la ciudad, concretamente en Fuencarral-El Pardo, el pasado otoño trajo la rehabilitación del casco urbano de El Pardo, que incluyó la avenida de la Guardia, las calles Manuel Alonso y Mira el Río y la carretera de El Pardo a Fuencarral, con 592.645 euros gastados. La intervención supuso un impulso al comercio y a la hostelería del lugar y fomentó el uso social de los parques Martín Vela y Mar Océana.
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