Un pleno extraordinario de la Asamblea de Madrid celebrará el viernes 1 de diciembre el 40 aniversario de la Cámara y el 25 aniversario de su actual sede, en Vallecas, y en él intervendrán los expresidentes autonómicos excepto Ignacio González, que sucedió a Esperanza Aguirre tras su dimisión en 2012, y Ángel Garrido, que hizo lo propio en 2018 tras la renuncia de Cristina Cifuentes.
La razón es que intervendrán solo los "presidentes electos", según adelantó El País y confirman fuentes parlamentarias. Tomarán la palabra el socialista Joaquín Leguina (1983-1995), Alberto Ruiz-Gallardón (1995-2003), Esperanza Aguirre (2003-2011), Cristina Cifuentes (2015-2018) y la actual desde 2019, Isabel Díaz Ayuso.
Estas mismas fuentes han indicado que se han "recortado el número de intervenciones" y que se aprobó por "unanimidad" en la Mesa de la Asamblea. De hecho, han añadido, se ha prescindido también del grueso de los presidentes de la Cámara.
De los doce que han ostentado ese cargo, tomarán solo la palabra Pedro Díez Olazábal (1991-1995), Juan Van-Halen Acedo (1995-1999) y el actual desde las elecciones de 2023, Enrique Ossorio. El objetivo sería que no se prolongara mucho la sesión, que podría haber "llegado a las 20 intervenciones".
Fuentes de la Mesa de la Asamblea han explicado que Ángel Garrido envió la pasada semana un email a todos sus miembros mostrando su molestia porque no se le invitara a este acto. Algunos de los grupos han trasladado a Ossorio su disposición a que se le permita tomar la palabra en este acto.
En este mensaje Garrido supondría que la fórmula de "presidente electo" se habría usado para evitar así que también interviniera González, quien está procesado por presuntos casos de corrupción en la conocida como Operación Lezo.
Entre los presidentes autonómicos que han quedado fuera también constaría el actual presidente del Senado, Pedro Rollán. Este ocupó la Presidencia en funciones tras la marcha de Garrido a Ciudadanos tras conocerse que no sería el candidato del PP a la Presidencia de la Comunidad. La relación de Garrido con los 'populares' se resintió con ese traspaso en plena precampaña de las elecciones del 26-M al partido que competía por su mismo electorado y que quedó a cuatro diputados y menos de 100.000 votos.
A pesar de este choque, Garrido fue consejero de Ayuso en el cupo 'naranja' del Gobierno de coalición ostentando Transportes y siendo 'hombre fuerte' del vicepresidente Ignacio Aguado. Las tensiones entre los socios y la moción de censura fallida de Murcia llevaron a la disolución del Ejecutivo, la convocatoria de elecciones anticipadas y el cese de todos los cargos de Ciudadanos, incluido Garrido.
Además de los presidentes autonómicos y de la Cámara también intervendrán los portavoces de los grupos parlamentarios que la componen en esta legislatura: Carlos Díaz-Pache (PP), Manuela Bergerot (Más Madrid), Juan Lobato (PSOE) y Rocío Monasterio (Vox).
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