El 75 cumpleaños del rey Carlos III de Inglaterra no ha estado exento de polémica a raíz de la videollamada que el príncipe Harry y su esposa, Meghan Markle, han tenido con el monarca. Lo que a priori parecía un gesto de reconciliación entre padre e hijo ha terminado provocando un gran enfado en el seno de la familia real inglesa.
Los detalles de esta llamada terminaron filtrándose al medio británico Daily Telegraph, algo que no ha hecho ninguna gracia en palacio, según informa Page Six.
Entre otros datos, se ha sabido que fue Meghan Markle quien atendió la llamada que el príncipe Harry hizo a su padre, y que sus hijos, Archie y Lilibet, también participaron de la felicitación enviando un vídeo a su abuelo donde cantaban Cumpleaños Feliz.
Esta videollamada habría supuesto un "cambio notable" en las relaciones entre el rey, su hijo menor y su nuera, según comentó una fuente al Daily Telegraph.
Sin embargo, Carlos III esperaba mantener en secreto esa llamada con su hijo, y el hecho de que se hubiese filtrado habría causado malestar. Así lo ha asegurado una fuente conocedora de la familia real británica a Page Six, que ha tachado a los duques de Sussex de ser "totalmente hipócritas" por no haberse guardado esa información.
"Harry y Meghan luchan por su privacidad cuando les conviene y, sin embargo, en el momento en que Harry habla por teléfono con el rey, sale en un periódico", indica este experto en la casa real inglesa.
Por su parte, fuentes cercanas a los duques de Sussex han manifestado que ellos no han sido quienes han filtrado la noticia y que la llamada de Harry a su padre fue "cálida".
Esta es la primera conversación telefónica que se conoce —y también el primer acercamiento— entre el rey Carlos III y su hijo menor, seis meses después de la publicación de las memorias del príncipe Harry, En la sombra, donde critica tanto a la familia real como a su madrastra, la reina Camilla.
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