La mega influencer Chiara Ferragni y su marido, el cantante Fedez, siguen disfrutando de unas maravillosas vacaciones en Ibiza en compañía de sus pequeños, Leo, de 5 años, y Vittoria, de 2. 

La familia más mediática de Italia disfruta enormemente del tiempo que comparten entre ellos, sobre todo tras un curso repleto de obligaciones y compromisos sociales, en particular ella.

Se les puede ver constantemente haciendo planes familiares, como ayer, en que todos han disfrutado de un fantástico día de sol y playa en las costas ibicencas. Ella, vestida con ideales prendas de marca, aunque sea para ir a la playa, como las sandalias Hermés que luce.

Cuando solo tenía solo 16 años, Chiara empezó a publicar sus estilismos en el portal Flickr y, cinco años después, creó su propio blog de moda, The Blonde Salad. En menos de dos años, ya registraba 110.000 visitas en un día, y lo que vino después cambió las reglas del juego a la hora de crear y generar nuevos negocios.

Ferragni consiguió que en 2015 su caso se convirtiese en objeto de estudio de la Harvard Bussiness Review, el primero que se realizaba de una influencer de moda. Sus productos generan unos 40 millones de euros al año. 

La marca Ferragni vende por sí misma y arrastra a tantos seguidores que nadie quiere perder la oportunidad de llegar hasta ellos. Eso sí, como todo personaje público, casi siempre tiene detrás a una serie de haters que se dedican a criticar cada uno de sus pasos.

Influyente y poderosa, Chiara disfruta asimismo de una legión de seguidores, que adoran por donde pisa y pasa. Y elogian desde los estilismos de sus hijos a la belleza que desprende toda la familia sentada a la puerta de su casa ibicenca.