Cuando solo quedan días para la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, la hermana de la marquesa de Griñón, Ana Boyer, y su pareja, Fernando Verdasco, han acudido a la cínica Ruber de Madrid. 

El motivo, según informa Europa Press, se desconoce por el momento. pasaron varias hotas en su interior y abandonaron el centro sanitario en coche, girando la cabeza al paso por la zona donde se encontraba la prensa. 

Ha ocurrido tras regresar a Madrid de unas breves escapadas a Mallorca y Marbella para encarar las jornadas que tienen que ver con la boda de la celebrity, uno de los eventos del año.

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Da la casualidad de que en ese mismo hospital está ingresado desde el pasado sábado el exnovio de su madre, Mario Vargas Llosa, tras haber sido diagnosticado de Covid-19.

"En vista del interés de los medios por el estado de salud de nuestro padre, hacemos público que está hospitalizado desde el sábado tras habérsele diagnosticado el Covid-19. Está siendo tratado por excelentes profesionales y acompañado por su familia. Rogamos a los medios de comunicación respetar en estos momentos su privacidad y la nuestra", señaló este lunes su hijo Álvaro Vargas Llosa en redes sociales.

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Vargas Llosa ya fue ingresado anteriormente por esta misma enfermedad, en concreto en abril del año 2022, donde pasó varios días en una clínica en Madrid tras presentar "algunas complicaciones" por su positivo en coronavirus.

En cualquier caso, la evolución que tuvo fue favorable. El autor hispanoperuano se encontraba aislado en su casa de Madrid tras dar positivo en Covid desde el 19 de abril de 2022.