María Pombo y Pablo Castellano ya están en casa con su hija Vega. La pareja ha abandonado este jueves el hospital dos días después del nacimiento de la pequeña.
Sonrientes y visiblemente agradecidos con el cariño que han recibido en las últimas horas, la influencer y el diseñador de interiores han posado y atendido a la prensa. Pombo ha abandonado el centro de salud con la bebé en sus brazos.
La pareja ya descansa con Vega en su casa de Madrid tras vivir un parto un tanto complicado. Ambos anunciaron a través de sus redes sociales que, aunque la pequeña y la madre están bien, Pombo no dio a luz con tanta calma como sucedió con Martín, su primer hijo, a finales de 2020.
"Fue un parto un poco complicado, y aunque están las dos bien, Meri se está recuperando de la cesárea y algún efecto secundario de la medicación. Vega es pequeñita y se está adaptando al nuevo mundo poco a poco", expresaron, publicando después un vídeo de la bebé.
"El imprevisto más bonito", decía, no obstante, Casteallanos en su historia de Instagram, apoyado por una foto de sus manos entrelazadas con las de la influencer.
María Pombo, que aglutina en sus cuentas en las redes sociales tres millones de seguidores, se casó con Pablo en Cantabria en junio de 2019, y poco después reveló que los médicos le habían detectado un principio de esclerosis múltiple, lo que no impidió que se quedara embarazada de su primer hijo, Martín.
Ahora, su historia de amor suma un nuevo capítulo con el nacimiento de Vega, cuya llegada estaba prevista para el 16 de julio. A pesar de la dureza del momento, la familia se muestra feliz.
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