Julia Fox niega que se haya medicado para reducir de peso

Por lo visto, se ha convertido en muy poco tiempo en un método muy utilizado entre la jet set de California para perder peso de forma muy rápida: se trata del medicamente Ozempic. Este fármaco hay quienes lo necesitan para tratar la diabetes, que es para lo que está fabricado, y sin embargo en las últimas semanas hay una escasez tal que los usuarios de las redes han comenzado a señalar a famosos que podrían estar utilizándolo a tenor de sus recientes pérdidas de peso. Entre estas estrellas, Julia Fox.

La actriz y modelo de 33 años ha negado categóricamente que haya siquiera probado el Ozempic en una entrevista con Entertainment Tonight. "Ni lo tomo ahora ni lo he tomado nunca", ha declarado la intérprete de Diamantes en bruto y Sin movimientos bruscos sobre este medicamente cuyo nombre genérico es semaglutida.

"De repente toda esa gente viene a por mí diciéndome que por qué tomo la cosa esa para perder peso...", ha declarado Fox, que se ha quejado de la falta de pruebas desde las redes sociales para atacar a alguien. "Me dicen que estoy tomando Ozempic o como se llame y no es verdad", ha añadido la actriz.

Julia Fox se defiende tras su última pasarela: "Creo en la cultura de la cancelación, pero..."

"No, nunca haría algo como eso. Hay diabéticos que sí lo necesitan", ha continuado la modelo, que ha hecho referencia a la continua escasez y falta de accesibilidad al Ozempic para quienes realmente lo necesitan, dado que la sanidad estadounidense es privada y dicho medicamento ya cuesta alrededor de los 1.000 dólares.

Aunque ha sido criticada por negarlo, lo cierto es que Julia Fox nunca ha tenido demasiados problemas en hablar de los tratamientos que utiliza, pues el pasado mes de marzo, en una entrevista con la revista Elle, ella misma admitió que previamente se había sometido tanto a una liposucción y como a inyecciones de bótox.

Además, aunque ahora mismo no siente la necesidad, afirmó que no descarta la posibilidad de volver a pasar por el quirófano en el futuro, si bien según ella ha acabado con el uso del bótox. De hecho, lleva varios meses criticando la industria de la belleza y ha bromeado con demandar al próximo producto que tenga la etiqueta de "antienvejecimiento" en el envase.