Ante esta situación, Educación permite que se tomen dos medidas: que el niño avance de curso o ampliarle  los contenidos de alguna asignatura e impartir conocimientos en función de los intereses del niño.

Otros estímulos

Desde que comenzaron las clases, 22 familias han solicitado que su hijo pase de curso. Según fuentes educativas, esta medida se adopta «cuando se considera que el niño ha superado los objetivos de su clase, y como máximo puede avanzar dos cursos».

Para estimular a estos niños, algunos colegios han puesto en marcha experiencias innovadoras como La caja mágica del CP Cervantes de Ribarroja. Una profesora de primaria que tenía una niña superdotada ideó una caja en la que metió varios sobres. Algunos contenían fichas con actividades de ampliación de los contenidos trabajados en el aula y otros, sorpresas como golosinas.

Los niños podían coger un sobre cuando acababan los deberes propuestos para ese día. Así «se incentivaba la consecución de contenidos mínimos, creatividad, ampliar conocimientos...».

En estos momentos, un equipo de expertos de Educación trabajan en un protocolo de detección de niños superdotados en secundaria y en crear, además, propuestas de atención educativa.

Ellas pasan más inadvertidas

Unos 70 niños superdotados, de 5 a 16 años, forman parte de la Asociación Valenciana de Apoyo al Superdotado y Talentoso (AVAS). Según una de sus psicólogas, «se detecta a más niños porque las niñas se adaptan al grupo y pasan inadvertidas». Las conductas que delatan a estos niños son: inicio precoz del habla, realizan preguntas complejas y acaban los deberes antes que sus compañeros. AVAS organiza actividades para ellos a partir del 15 de octubre. Más información: 963 418 614.