Levi Dewey, que está a punto de cumplir los 21 años, llegó al hospital con síntomas de gripe y ha acabado con las piernas amputadas. A medida que los síntomas fueron a más, el joven sufrió una falla orgánica múltiple después de contraer una forma de gripe y posteriormente se vio afectado por una sepsis severa que además le dejó con un 30% de posibilidades de sobrevivir.

El pasado 7 de diciembre, Levi fue trasladado al hospital Royal Derby con síntomas parecidos a los de la gripe y dificultades para respirar, y con el paso de las horas su situación empeoró mucho hasta llegar al fallo multiorgánico. "Nos dijeron bastante pronto que Levi podría perder las piernas y necesitar una operación, estábamos preparados para este resultado si era para salvar su vida", explicó su madre a varios medios británicos, una vez que Levy está fuera de peligro y ha podido compartir incluso fotos de su estado actual.

"Obviamente, va a cambiar la vida de todos, pero es algo en lo que podemos trabajar como familia y tenemos una red de apoyo bastante sólida y positiva. Levi siempre ha tenido una mentalidad positiva y siempre ha visto su vaso medio lleno", añadió la madre.

Desde mediados de diciembre hasta ahora, casi dos meses después, el joven ha tenido que recuperarse muy lentamente. "A pesar de esta noticia, Levi se mantiene optimista sobre su futuro. Está muy agradecido de estar vivo después de estos eventos que cambiaron su vida", escribió la familia en un comunicado.

"Luego, una vez que haya aprendido a caminar, nos gustaría proporcionarle las mejores piernas protésicas a su medida para que pueda vivir una vida lo más independiente posible, disfrutando de las muchas actividades que hacía antes de este trágico evento que alteró su vida para siempre", concluyeron sus padres.