El cantante flamenco y poeta valenciano Niño de Elche (Francisco Contreras Molina, 1985) vuelve a explorar los límites de la música en su trabajo discográfico número 13, 'Flamenco. Mausoleo de celebración, amor y muerte', a prueba de supersticiones. 

La suya es una de las propuestas más innovadoras y transgresoras del flamenco contemporáneo, abierta a todo tipo de exploraciones entre géneros y sonoridades. Y con este nuevo disco vuelve a deconstruir el flamenco para, desde sus cenizas, hacerlo resurgir de las mismas y elevarlo a la categoría de música sin fronteras. 

A través de 14 canciones, repasa todos los palos del género jondo. De los más conocidos, como seguiriyas y fandangos, como a los menos comunes alboreá o bambera. La producción del trabajo corre a cargo del catalán Raül Refree y su carga experimental es menor a la de otras producciones de Niño de Elche como 'Antología del Cante Flamenco Heterodoxo’ o ‘La exclusión’. 

Colaboración con Rosalía en 'Seguiriya Madre' 

Refree ya trabajó con otra rupturista del flamenco como la catalana Rosalía en 'Los Ángeles', disco flamenco que precedió a su eclosión como artista internacional con 'El Mal Querer'. Ahora, Niño de Elche colabora con la de Sant Esteve Sesrovires en el tema 'Seguiriya Madre'. Ambos artistas se reivindican ante los más puristas del género como parte fundamental del flamenco del siglo XXI en esta canción que inicia él y acaba ella. 

Lepant, 150; El sábado a partir de las 20 horas; Entradas agotadas; auditori.cat.