Una rebelión interna, un candidato fallido y la mano invisible de Trump: los republicanos, incapaces de elegir presidente del Congreso

Kevin McCarthy, en la Cámara de Representantes antes de una de las votaciones.
Kevin McCarthy, en la Cámara de Representantes antes de una de las votaciones.
JIM LO SCALZO
Kevin McCarthy, en la Cámara de Representantes antes de una de las votaciones.

Parecía sencillo pero no lo está siendo. Las divisiones internas del Partido Republicano han impedido durante dos jornadas la elección del sucesor de la demócrata Nancy Pelosi como presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos a pesar de ostentar la mayoría parlamentaria suficiente para hacerlo. 

La cámara baja se encamina a su tercer día sin presidente -y sin actividad legislativa- después de que el líder republicano Kevin McCarthy fallara de nuevo este miércoles en su intento por hacerse con el puesto.

Por primera vez en 100 años, la Cámara Baja fue incapaz de nombrar a su nuevo presidente en una sola votación. McCarthy, el californiano líder de la bancada republicana, ha fracasado por una rebelión del ala dura de su propio partido.

La votación para elegir al que liderará la cámara en la 118 legislatura, que no puede echar a andar hasta que alguien asuma el puesto vacante, se ha convertido en un auténtico bucle para un partido en el que la sombra de Donald Trump es alargada y que ha elegido el camino difícil tras una victoria agridulce en las elecciones de medio mandato celebradas hace unos meses.

¿Son los republicanos un partido dividido?

A la vista de los acontecimientos, la respuesta es clara: sí. El origen de esta situación de bloqueo está en las elecciones de medio mandato del pasado 8 de noviembre en las que se renovó el Congreso. Aunque los republicanos arrebataron a los demócratas la mayoría de la Cámara Baja y podrán complicarle las cosas al presidente Joe Biden en sus últimos dos años de mandato, la victoria conservadora fue ajustada y lejos de la "ola roja" que habían vaticinado muchos medios.

Además, los demócratas no solo consiguieron retener la mayoría en el Senado, sino que ampliaron su control con un nuevo escaño. Los republicanos más moderados culpan de este insuficiente desempeño electoral al papel protagónico que conserva en el partido el expresidente Donald Trump, que colocó a varios candidatos extremistas que acabaron perdiendo. Mientras, el ala dura responsabiliza a la campaña diseñada por McCarthy, quien lidera el partido en la Cámara Baja desde 2014.

¿Quiénes se han rebelado?

Los ultraconservadores de la formación, que no quieren a McCarthy al frente de la Cámara. Y es que en un claro órdago contra su líder, un pequeño grupo del ala más derechista del partido, agrupado en el Freedom Caucus, postuló a candidatos alternativos. La escisión ya se veía venir incluso antes de la apertura de la legislatura. Tras una reunión con sus compañeros, McCarthy compareció este martes ante la prensa para anunciar que no tenía los votos suficientes y que habría una "batalla en el hemiciclo". Además, este sector llegó a presentar candidatos alternativos como Andy Biggs, de Arizona, y Jim Jordan, de Ohio. En el otro lado, los demócratas sí respaldaron a su opción: el congresista Hakeem Jeffries, de Nueva York, que ha concentrado siempre los 212 votos de los que dispone la formación.

¿Quién es Kevin McCarthy?

Kevin McCarthy lidera el Partido Republicano en la Cámara Baja desde hace casi nueve años y por eso su opción siempre ha parecido la más lógica. Fue presidente de los Jóvenes Republicanos de California y de la Federación Nacional Republicana Joven y ya consiguió su escaño en el 2006, por lo que su carrera política es dilatada. Se trata de uno de los hombres fuertes de Trump en su momento, firme defensor del expresidente y además proclive a poner en duda los resultados electorales, tal como hizo en 2022 cuando venció Joe Biden. Respalda también las teorías Qanon de la conspiración.

¿Qué dice Trump?

Para muchos quien está agitando estos movimientos contra McCarthy es Donald Trump, a quien puede no interesarle la estabilidad en el Partido Republicano de cara sobre todo a las primarias para ser candidato presidencial en 2024, a las que ya anunció que se presentará. Pero sus palabras van por otro lado y este miércoles se posicionó de forma pública en favor del candidato. 

"Algunas conversaciones realmente buenas tuvieron lugar anoche y ahora es el momento de que todos nuestros grandes miembros republicanos de la Cámara voten por Kevin, cierren el trato y tomen la victoria", apuntó a través de un mensaje en la red social Truth Social. "Republicanos, no conviertan un gran triunfo en una derrota gigante y vergonzosa. Es hora de celebrar, te lo mereces. Kevin McCarthy hará un buen trabajo, y tal vez incluso un gran trabajo", añadió. 

¿Por qué esta situación es histórica?

La última vez que se necesitó más de una votación para elegir al speaker fue hace un siglo. En 1923, el presidente de la Cámara fue elegido en una novena votación, mientras que en 1869 se logró tras 60 votaciones, un proceso que se alargó durante dos meses. Hay rumores que incluso apuntan a que los republicanos ya están pensando en otro candidato que pueda hacer avanzar la situación, ahora completamente estancada. La Cámara no puede dirimir ningún asunto hasta que sea nombrado el speaker, que es la tercera autoridad de Estados Unidos, después del presidente, Joe Biden, y de la vicepresidenta, Kamala Harris, quien también preside el Senado.

En juego está la sustitución de Pelosi, quien ha presidido la Cámara Baja en dos períodos (2019-2023 y 2007-2011) y que anunció que deja el liderazgo de la bancada demócrata tras la derrota electoral. El nuevo Congreso estadounidense inicia esta nueva legislatura con la previsión de que los dos últimos años de mandato del presidente, Joe Biden, se vean obstaculizados por la oposición republicana.

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