Este miércoles el patronato del Museo de Arte Popular de México daba a conocer que su fundadora y presidenta vitalicia, Marie Thérèse Hermand de Arango, había fallecido a los 74 años de edad, sin dar más detalles sobre las causas de la muerte. Poco después, era la Secretaría de Cultura del gobierno quien lamentaba la pérdida de una "incansable promotora del arte de los pueblos de México".

Y eso que ella no era de allí. Nació en El Cairo, en Egipto. Su padre era Marcel J. Hermand, un hostelero que acabaría mudándose a Nueva York para dirigir el hotel St. Regis. Su buen hacerllamó la atención de César Balsa, vicepresidente de la cadena en México, y le hizo trabajar con él. Marie Thérèse tenía 17 años y se enamoró de su nuevo hogar.

A pesar de que se podía pasar horas hablando de la artesanía egipcia, quedó prendada del trabajo manual mexicano, lo que la llevaría a reivindicarlo e intentar colocarlo en el lugar histórico que merece, motivo por el que la han recordado tanto personalidads y embajadores de México como instituciones gubernamentales.

Algo a lo que le ayudó su marido, el empresario y heredero multimillonario Manuel Arango, a quien conoció 1966, mucho antes de que vendiera junto a sus hermanos la cadena de supermercados Grupo Aurrerá al gigante Walmart.

Con él tuvo a sus dos hijas: Manuela y Paula. Esta última, de hecho, es quien publicó una de las últimas imágenes de Marie Thérèse, recostada sobre el sofá y muy feliz, con el título "¡Amo verte reír! Je t'aime".

Marie Thérèse, en un intento por dar a conocer el talento mexicano inició varios proyectos que ponían de relieve el trabajo artesanal y popular de distintas regiones del país. El más relevante, sin duda, fue su trabajo como impulsora de la apertura de puertas, en 2006, del Museo de Arte Popular (MAP), en el casco histórico de Ciudad de México.

Asimismo, también fue suya la creación de la Asociacón de Amigos del MAP, que continúa a día de hoy su intención primitiva: promover y ser benefactora de multitud de artistas autóctonos, poniendo de relieve la importancia de la materia prima y la fabricación única de cada pieza.

Esto conllevó que en 2009 fuese distinguida con el galardón Women Together, un importante reconocimiento que otorga la Organización de las Naciones Unidas (ONU). "Ayudar es muy fácil una vez que se aprende. Cada quien tiene su nicho para ayudar, el mío definitivamente es el arte mexicano", declaró a la revista Quién en 2012.