Un estudio promovido por la empresa Campos Estela, dedicada a la organización integral de comedores escolares, indica que en los comedores escolares habrían malgastado alrededor de 100 millones de kilos de alimentos durante los últimos 10 años. Esta cifra se desprende de la iniciativa “Pesa y Piensa”, puesta en marcha por la compañía, en la que se han ido tomando datos del peso de los alimentos que se desperdiciaban en los colegios durante 10 años. Según las cifras obtenidas con esta experiencia, se malgastan unos 120 gramos diarios de comida por alumno en cada menú.

Según el informe “100 millones de kilogramos. 10 años de lucha contra el malgasto alimentario en los comedores escolares catalanes”, el coste anual total de todo este desperdicio es de alrededor de 36 millones de euros. Sin embargo, no es el sector donde se desaprovecha más comida. Los hogares es el lugar donde este desaprovechamiento es mayor, ya que se produce el 58% del malgasto alimentario.

El resto del desaprovechamiento se divide entre el 26% que se produce en los comercios y el 16% de malgasto alimentario que se da en la hostelería. El informe recuerda que las administraciones se han fijado el objetivo de reducir el despilfarro de alimentos un 50% en 2030 mediante la aprobación de leyes específicas sobre esta problemática.

Pesar y pensar

Campos Estela afirma que mediante la implantación de su programa “Pesa y Piensa” en las escuelas, han logrado reducir un 75% el malgasto de comida. Esta iniciativa implica a los alumnos, que tras haber comido, pesan lo que no han ingerido y mediante diferentes actividades lúdicas y educativas toman conciencia del problema.

Además, participan en la confección de los menús, siguiendo siempre unas pautas nutricionales adecuadas, y éstos, al estar más en sintonía con sus gustos, permiten un menor malgasto. Otro aspecto que ayuda a que no despilfarre comida es que los alumnos participen también en el proceso de elaboración, así como en el ajuste de las raciones.

Según la experiencia de Campos Estela, los menús que dejan más alimentos sin comer son los que se combinan patata y pescado, por un lado, y arroz y legumbres por otro. La fruta es otro de los productos que genera más problemas en este aspecto, y hay que profundizar en como pelarla y cortarla para que los niños disfruten más de ella. También ofrecer un abanico de posibilidades y que los alumnos seleccionen qué fruta quieren comer.

Problema general

El estudio también ofrece datos de malgasto alimenticio a nivel general. Según un estudio auspiciado por la Universidad Autónoma de Barcelona y dirigido por el geógrafo e investigador Paco Muñoz, en Cataluña se consumen 3,74 millones de alimentos sólidos, aproximadamente unos 500 kilos anuales por persona. Alrededor de 1,2 millones de toneladas se descartan como residuos. Des éstos, aproximadamente unas 920.000 toneladas son residuos inevitables, y por tanto, el malgasto alimentario es unas 260.000 toneladas, o lo que es lo mismo, unos 35 kilos de comida anuales por persona.

Esta cifra supone un 7% del total de alimentos sólidos consumidos en Cataluña, y con ellos, se podría alimentar a más de medio millón de personas durante todo un año entero.

Finalmente, el informe de Campos Estela une el problema del malgasto alimentario con la situación de crisis climática global, ya que indica que el 31% de las emisiones contaminantes generadas en el mundo se producen por la producción, transformación y comercialización de alimentos. Además, la producción anual de carne consume tanta agua como toda la población española durante 20 años.