Destituido el hasta este lunes comisario jefe de los Mossos d’Esquadra, Josep Maria Estela, tras menos de un año en el cargo. El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, le ha cesado tras un encontronazo que tuvieron ambos el pasado viernes, y ahora pasará a ser jefe de la Regió Policial de Lleida. El comisario Eduard Sallent asumirá el cargo de Estela en funciones.

Lo han anunciado desde la conselleria de Interior, después de que el viernes hubiera discrepancias entre el ya excomisario jefe y el conseller sobre la feminización del cuerpo policial, con la elección de los seis nuevos comisarios. De los 34 intendentes que se presentaron al concurso, 12 obtuvieron la máxima nota, y de estos, cuatro eran mujeres. Elena apostó por promocionarlas a ellas y a dos hombres, pero Estela abogó por escoger a cuatro hombres y dos mujeres, pues argumentó que hacer lo contrario podría suponer problemas internos.

Tras esa conversación con el conseller, el que hasta este lunes ha sido comisario jefe de los Mossos, contrariado, contó a su círculo de confianza que se plantearía pedir su traslado a la Comisaría de Lleida cuando en diciembre se remodelara la estructura de mando, según desvelaron fuentes conocedoras de esta crisis interna. Con el nombramiento de Estela como jefe de la Regió Policial de Lleida, Interior ha querido demostrar que no se le ha castigado.

Pero ya antes del choque del viernes, en junio, el ya excomisario jefe de los Mossos echó un pulso al conseller de Interior, al amenazar con marcharse si no se echaba a Sallent de la Jefatura, al atribuirle injerencias políticas. La noticia se dio a conocer, además, durante la convalecencia de Elena por una operación de vesícula.

Según han contado fuentes conocedoras del encuentro en el que el conseller destituyó a Estela, de tan solo media hora, este último se habría negado a abandonar su puesto. Por ello, el titular de Interior ha tenido que conminarle, y lo ha atribuido a su "ausencia constante" en el día a día de la policía catalana.

Después de que le hayan cesado, Estela ha enviado una carta de despedida a los Mossos, en la que les ha pedido que no se "distraigan" con el "ruido mediático" ni la "mezquindad". También les ha llamado a mantener sus valores de servicio público "con la máxima y radical neutralidad política".

Estela ha asegurado que acaba su mandato al frente de los Mossos como lo empezó, pues sigue reivindicando los valores de la policía catalana y su arraigo en el territorio, así como mostrando su orgullo por formar parte de ella. "Quizás es porque sé ver en el cuerpo que dirijo el compromiso, la lealtad, el esfuerzo y la vinculación con el territorio", ha dicho.

La Associació Professional de Comandaments de la Policia de Catalunya (COPCAT) ha mostrado su "tristeza" por la destitución de Estela "en tan poco tiempo". "Ya llevamos demasiados años de inestabilidad en la Prefectura y ha llegado la hora de que entre todos pongamos cordura, para conseguir la estabilidad que nos merecemos", ha apuntado la entidad en Twitter.

Por su parte, el SICME, sindicato que representa al 90% de los mandos de los Mossos, salió el domingo en defensa de Estela. "No entenderíamos su cese. Necesitamos estabilidad y continuidad, así como respeto a la Jefatura del Cuerpo. No toleramos que se ponga en duda su profesionalidad", remarcó.

28 años en los Mossos

Estela, de 51 años, lleva en los Mossos desde 1994. Ha pasado por seis de las nueve regiones policiales de Cataluña y fue comisario jefe de la de las Terres de l’Ebre y del Camp de Tarragona. También ha ejercido como docente en la Escola de Policia de Catalunya y el año 2014 formó parte de un proyecto del comité de prevención de la tortura del Consejo de Europa, donde trabajó con la policía de Albania.