El expresidente del Parlament y actual conseller de Empresa, Roger Torrent, y los miembros soberanistas de su Mesa han invocado la inviolabilidad parlamentaria para evitar que prosiga su juicio por desobediencia al Constitucional y han advertido de que en su caso está en juego la separación de poderes. Momentos antes de que se le empezara a juzgar, Torrent (ERC) ha asegurado que vería "demencial" que acabara siendo inhabilitado.

En el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha arrancado este miércoles el juicio a Torrent y a los miembros de ERC y JxCAT en la Mesa del Parlament en la pasada legislatura -Josep Costa, Adriana Delgado y Eusebi Campdepadrós-, para quienes la Fiscalía pide hasta un año y ocho meses de inhabilitación por desoír al TC por tramitar en noviembre de 2019 resoluciones a favor de la autodeterminación y de reprobación de la monarquía.

El TSJC juzga a partir de este miércoles a la Mesa de Torrent por presunta desobediencia

En el trámite de cuestiones previas, una vez la sala ha desestimado la suspensión de la vista solicitada por la Fiscalía y las defensas hasta que se resuelva si se readmite en el tribunal a un magistrado que fue revocado, los abogados de Torrent y de su Mesa han pedido que se anule el juicio, invocando que les asiste la prerrogativa de la inviolabilidad parlamentaria, como garantía de la separación de derechos.

Pese a que en un primer momento el presidente del tribunal, el magistrado Carlos Mir, había anunciado que resolverían en sentencia la apelación sobre la inviolabilidad, finalmente la sala ha decidido comunicar mañana jueves, antes de iniciar las testificales, cómo resolverán esta cuestión: "es un tema complicado, no es fácil", ha admitido.

De hecho, las defensas han advertido de que la inviolabilidad parlamentaria impide que sean juzgados y que, si pese a ello el juicio prosigue, tampoco se podría interrogar como testigos, sobre la actividad en la cámara, a otros diputados y trabajadores del Parlament, lo que afectaría a las siete testificales previstas para mañana.

El abogado Andreu Van den Eynde, que representa a Torrent, ha argumentado que la inviolabilidad parlamentaria también cubre aspectos como la admisión a trámite de resoluciones y ha destacado que las mociones que han llevado al banquillo a los acusados trataban sobre aspectos de interés público, sin incitar al odio ni a la violencia.

"¿Si la inviolabilidad no impide este juicio, para qué sirve la inviolabilidad?", ha preguntado el letrado, que ha asegurado que lo que pretende la Fiscalía con este caso es "la desaparición" de esta prerrogativa que protege a los diputados y que considera básica para garantizar la separación de poderes.

Van den Eynde se ha mostrado convencido de que si el juicio prosigue y acaba en condena, en unos años el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) no "tolerará" la interpretación de que la Mesa de un Parlamento haya cometido un delito por admitir a trámite una moción que expresa un debate de interés público.

En la misma línea, el exvicepresidente primero del Parlament Josep Costa -que es abogado y se representa a sí mismo en el juicio-, ha subrayado que la inviolabilidad parlamentaria es un "límite absoluto" a la jurisdicción de un tribunal, lo que tendría que haber impedido abrir el caso y llevarlo a juicio.

Costa ha retado al tribunal a buscar algún caso en un país "decente" en el que se haya dictaminado que la inviolabilidad parlamentaria "no es permanente, perpetua y absoluta". "No puede ser que la inviolabilidad tenga como excepción la desobediencia al Constitucional", ha advertido el exvicepresidente, que considera que España se sitúa en este caso "al mismo nivel que Turquía".

Y es que, según Costa, la inviolabilidad parlamentaria es el concepto sobre el que pivota la separación de poderes. "Y si no hay separación de poderes, no hay democracia", ha exclamado.

En este sentido, ha asegurado que los magistrados "no tienen derecho" a "interferir" en lo que vota el Parlament, si se respeta un régimen de separación de poderes, hasta el punto de que los tribunales no pueden dar a los diputados órdenes de obligado cumplimiento.

El exvicepresidente del Parlament considera que tendría que anular todo el procedimiento "desde el primer día" porque, además de su inviolabilidad, la mayoría de resoluciones del caso las adoptaron dos magistrados que han sido apartados del juicio por su aparente falta de imparcialidad.

Costa ha recordado y leído otra resolución contra la monarquía que impulsó en 2020, y que fue aprobada por el Parlament, y ha afirmado que si no le han acusado por ella es porque en 2019 había un "interés oculto" para abrir este procedimiento: cree que al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le molestaba lo que ocurría en la cámara catalana durante la campaña de elecciones generales.

Además, Costa, Delgado y Campdepadrós -que ya no son diputados y, a diferencia de Torrent, ya no son aforados- también han pedido que su caso pase a manos de un juez ordinario y no del alto tribunal catalán.

La inviolabilidad parlamentaria ya fue uno de los ejes del juicio por desobediencia en el que el TSJC condenó 20 meses de inhabilitación a los miembros soberanistas de la Mesa en la etapa de Carme Forcadell, pero la sala concluyó que los actos parlamentarios no pueden tener "en ningún caso como finalidad" el incumplimiento de la ley, en especial de la Constitución.

Según la sentencia, dictada en octubre de 2020, la inviolabilidad parlamentaria "no extiende su protección a actos intencionados de rechazo de las decisiones del Tribunal Constitucional".

El fiscal dice que hay "un bulo" sobre la mesa de diálogo

El fiscal José Joaquín Pérez de Gregorio ha advertido de que hay "una intención clara" de que el juicio contra Torrent no se celebre y ha lamentado que circule "un bulo" de que la mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat está estudiando el archivo de la causa.

En las cuestiones previas del juicio contra Torrent y su Mesa, el fiscal ha afirmado que tiene la "impresión, probablemente equivocada", de que se quiere impedir que el juicio se celebre.

No obstante, este miércoles ha sido el propio ministerio público, a través de la otra fiscal del caso, Assumpta Pujol, quien ha pedido su aplazamiento a la espera de que se resuelva sobre la recusación de un magistrado de la sala.

Según el fiscal, "circula un bulo" de que el juicio contra Roger Torrent "forma parte de la tanda de procedimientos judiciales que se han llevado a la mesa de negociación, en lo que se viene a llamar la desjudicialización y en la que se pretende el archivo de las causas penales por el procés".

"Estoy seguro de que es un bulo y que la sala no se encuentra afectada ni de refilón por él", ha agregado Pérez de Gregorio.

Asimismo, el fiscal ha rechazado que la actuación de los acusados esté amparada por la inviolabilidad parlamentaria y ha recordado que no se juzga a los acusados "por emitir su voto ni opinar en materia política", sino por permitir la tramitación y posterior aprobación de resoluciones "contrarias a la legalidad constitucional y prohibidas por el Tribunal Constitucional".

Respecto a las quejas de las defensas porque Vox ejerza la acusación particular en la causa, el fiscal ha apoyado que pueda hacerlo como "cualquier partido político", sin que exista "ninguna razón objetiva" para que sea apartado del procedimiento.

"Otra cosa es que por puro capricho se la quiera apartar porque molesta que esté sentado aquí", ha añadido el fiscal, que cree que las defensas tampoco han expuesto "argumentos sólidos" para que así se acuerde.

Torrent: "Defenderemos lo que hicimos"

Torrent (ERC), ha asegurado que vería "demencial" que acabara siendo inhabilitado por un delito de desobediencia al tramitar resoluciones vetadas por el Constitucional cuando presidía el Parlamento catalán, y ha avanzado que en el juicio defenderá su actuación.

La Fiscalía Superior de Cataluña pide un año y ocho meses de inhabilitación, además de 30.000 euros de multa, para Torrent y para los exdiputados de JxCat Eusebi Campdepadrós -actual secretario de Relaciones con la Administración de Justicia de la Generalitat- y Josep Costa.

En declaraciones a TV3 antes de acudir al TSJC, Torrent ha explicado que lo que hizo la Mesa fue "permitir un debate en el Parlamento sobre dos temas que preocupan a la ciudadanía". "Defenderemos lo que hicimos y los principios del parlamentarismo", ha aseverado.

"Es una anomalía, desde un punto de vista democrático, que se haga este juicio. Me parece demencial que podamos ser inhabilitados por algo como esto", ha dicho Torrent, que ha considerado que este juicio es "la muestra de la regresión de derechos fundamentales y ya veremos si se celebra hoy, aunque no debería celebrarse ni hoy ni nunca".

Por otro lado, sobre la continuidad o no de JxCat en el Govern, tras la crisis del Ejecutivo de coalición con ERC, Torrent ha urgido a Junts a "decidir si quiere estar en el gobierno o en la oposición" y tomar esa decisión "lo más pronto posible".

Apoyo a las puertas del TSJC

Torrent ha entrado al TSJC a las 9.55 horas. Asimismo, también han llegado los miembros independentistas de la Mesa del Parlament Eusebi Campdepadrós y Adriana Delgado, que también serán juzgados, y en cambio a las 10 horas, cuando estaba previsto empezara el juicio, no ha llegado el exvicepresidente primero Josep Costa.

Este miércoles está previsto el trámite de cuestiones previas, este jueves declararán siete testigos y el viernes será el turno de los interrogatorios a los acusados.

Ante las puertas del TSJC se han concentrado Laura Borràs, Francesc de Dalmases, Mònica Sales, Aurora Madaula, Albert Batet y Josep Rius de Junts; Oriol Junqueras, Marta Vilalta y Carme Forcadell de ERC y Eulàlia Reguant, Dolors Sabater y Carles Riera de la CUP, entre otros.

También han querido mostrar su apoyo los consellers Josep Maria Argimon, Tània Verge, Josep Cambray, Violant Cervera, Lourdes Ciuró, Laura Vilagrà y Teresa Jordà, además de otros representantes de Òmnium y de la Assemblea Nacional Catalana (ANC).

Costa acude vestido con toga para autodefenderse

Costa ha acudido vestido con toga al juicio, en el que Costa está acusado y a la vez, como abogado, se defiende a sí mismo.

No ha usado la puerta principal para acceder al Palacio de Justicia y se ha presentado vestido con la toga ante la Sala, a la que las partes no han accedido hasta pasadas las 10.30 horas por la ausencia de un procurador de Vox, que es acusación particular en la causa.

"Dado el cúmulo de despropósitos cometidos por el TSJC para llegar hasta aquí, he decidido que la manera más disruptiva de plantarles cara es ir y desmontar este simulacro de juicio desde dentro", ha expuesto Costa en un tuit.

En el mismo mensaje, ha añadido: "Que no puedan consumar este ataque a la democracia sin oposición".

Borràs ve el juicio como una "anomalía democrática"

La presidenta de Junts, Laura Borràs, ha asegurado que el juicio es "una anomalía democrática" y una injusticia máxima porque pretende coartar, según ella, el debate en la Cámara catalana.

En declaraciones a los medios ante en Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) tras acompañar a Torrent y los exmiembros de la Mesa, Borràs ha sostenido que este juicio pretende hacer una advertencia a los diputados y los miembros de la Mesa de que hay "jueces que no permitirían que se hablase de todo en el Parlament".

Por su parte, el exsecretario de la Mesa Eusebi Campdepadrós ha afirmado que este juicio es gravísimo desde el punto de vista democrático, y ha criticado que pretenda "silenciar a los representantes del pueblo y que no puedan debatir sobre las cuestiones por las que se han presentado a las elecciones".

Riera pide que la Mesa sea un "muro"

El diputado de la CUP en el Parlament Carles Riera ha defendido este miércoles que la Mesa de la Cámara catalana debe ser un "muro que garantice el pleno ejercicio de la democracia y la defensa de los derechos civiles, políticos y democráticos".

En declaraciones a la prensa antes del juicio, ha lamentado que los acusados sean juzgados por defender estos derechos y ha defendido que la Cámara catalana debe ejercer sus funciones sin "injerencias judiciales y estatales".

"Queremos que el Parlament de Catalunya sea una institución plenamente democrática sin límites de ningún tipo y por eso es importante que sea un espacio donde se pueda votar de todo, hablar y decidir sobre todo", incluyendo la autodeterminación, la independencia y la crítica a la monarquía, ha recalcado el también secretario tercero de la Mesa del Parlament.