El presidente de la Generalitat ha solicitado a todas las fuerzas políticas del Parlament un acuerdo general de país para negociar con el estado la celebración de un referéndum con todas las garantías y con resultados vinculantes. Aragonès propone un acuerdo de claridad en el que se concrete cómo y cuándo los catalanes podrán votar en un referéndum.

En la parte final de su discurso en el Debate de Política General de esta mañana, Pere Aragonès ha lanzado esta propuesta por ser “inclusiva, democrática y homologable a nivel internacional”. Además, ha insistido que también es la vía más rápida y eficaz porque “solo así se podrán implementar sus resultados, y supera la imposibilidad que hubo hace cinco años de que los resultados fuesen implementados”.

El presidente de la Generalitat argumenta que si el referéndum tiene “garantías democráticas para todos”, todos aceptarán los resultados. Aragonès ha explicado en su discurso que acuerdos similares son los que permitieron consultas similares en Escocia o Canadá. De esta manera, “superaremos el bloqueo de las relaciones con el estado que perdura desde hace años”, ha asegurado Aragonès.

Voluntad mayoritaria

De cara a las formaciones políticas catalanas, el presidente ha señalado que “hay que iniciar un nuevo ciclo de acuerdos y consensos que ha de ser defendido delante del Estado”. Aragonès ha argumentado que hay que “traducir la decisión de la ciudadanía en consecuencias políticas”, y ha enviado a las fuerzas políticas nacionales el mensaje de que “hay que abordar el conflicto de fondo con el estado, que no es otro que la incapacidad para dar respuesta a la voluntad mayoritaria de la ciudadanía que quiere decidir el futuro votando”.

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Para apoyar esta afirmación, Aragonès se ha remitido a los datos del Centro de Estudios de Opinión, según los cuales, un 82% de los catalanes opinan que hay que votar. El presidente ha desglosado estos datos por partidos, señalando que tan solo los electorados de PP y Vox no quieren un referéndum. Sin embargo, ha afirmado que la voluntad de votar es mayoritaria entre los votantes de Esquerra y Junts, pero también apoyan un referéndum el 73% del electorado del PSC, e incluso el 50% del de Ciutadans.

Aragonès ha concluido que “hay que empezar a concretar cómo damos respuesta a la demanda de la ciudadanía que quiere votar”, y ha apuntado que la manera es “volver a tener una propuesta de país. Y el acuerdo de claridad es la herramienta necesaria”.

Referencias a Junts

Al inicio de esta propuesta, ha habido un momento en el que se ha dirigido directamente a Junts Per Catalunya, aunque sin nombrarlos. El presidente de la Generalitat ha señalado que “podemos partir de puntos de vista y puntos de salida diferentes, e incluso opuestos. Tenemos análisis y diagnósticos diversos, pero a pesar de eso, nos tenemos que sobreponer para volver a avanzar”. En ese momento, la presidenta de Junts, Laura Borràs, presente en la tribuna de invitados, ha hecho un ligero gesto de negación con la cabeza.

Minutos antes, Aragonès había hecho referencia a mantener la Mesa de Diálogo y la negociación con el gobierno central, uno de los puntos que más discrepancias causan entre ERC y Junts, para “poner fin a toda forma de represión”. También defendió estas conversaciones de cara a conseguir la amnistía para todos los condenados, y puso en valor haber conseguido la libertad de los encarcelados, algo que calificó de “primer paso hacia la amnistía”. Aunque reconoció que sería “difícil”, indicó que “hay que explorar esta vía”, valorando también que de momento se había logrado un compromiso de desjudicialización.