Con este fin, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Junta de Castilla y León, Unicaja Banco y el Ayuntamiento de Salamanca han "unido sus fuerzas" para crear este nuevo centro de "gran alcance y relevancia", que pretende convertirse en "motor de la cultura científica" en la región y en un modelo de gestión a nivel nacional e internacional.

El nuevo centro se ubicará en un histórico edificio del siglo XV, cuyo uso ha sido cedido al CSIC por Unicaja Banco. Así, con "un moderno y remodelado interior", la nueva Casa de la Ciencia tendrá entre sus objetivos crear un nuevo espacio cultural para la sociedad y servirá como punto de encuentro para los investigadores.

Este proyecto ha sido presentado en el Ayuntamiento de Salamanca por el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco; el alcalde de la ciudad, Carlos García Carbayo; el presidente de Unicaja Banco, Manuel Azuaga; y la presidenta del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Eloísa del Pino, quienes también han rubricado el acuerdo.

El nuevo centro en Salamanca contará con una programación anual que tomará protagonismo en la planta baja de la Casa de María la Brava, con una sala para exposiciones permanentes de 200 metros cuadrados.

Las exposiciones permanentes se combinarán con muestras temporales ubicadas en la primera planta, donde un espacio de más de 150 metros cuadrados acogerá eventos nacionales e internacionales, como el 'Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia' o el 'Día Internacional de la Cultura Científica', entre otros.

Según han avanzado después de la presentación, como ocurre en otras Casas de la Ciencia repartidas por el país, se sumarán programas transversales "de calidad" que perseguirán conectar con públicos más concretos, como la labor del 'Árbol de la Ciencia' que acerca los proyectos del CSIC a la ciudadanía; y alcanzar propósitos específicos, como el programa de 'Fomento de Vocaciones Científicas', que busca "despertar el interés por la ciencia" entre los más pequeños.

FERNÁNDEZ MAÑUECO

El presidente de la Junta de Castilla y León ha manifestado que esta Casa es un nuevo "motor" para la vocación científica e investigadora de Salamanca. "La investigación y la innovación son caminos de progreso y modernidad", según ha añadido.

Asimismo, durante su intervención, ha destacado que Castilla y León está "en el top cinco de España" en gasto en I+D en relación al Producto Interior Bruto (PIB), a la vez que ha asegurado que desde la Junta trabajan con el objetivo de "generar, captar y retener talento, y de favorecer su retorno".

AZUAGA

El presidente de Unicaja Banco, Manuel Azuaga, ha reiterado el "arraigo" de la entidad con Castilla y León y Salamanca, antes de recordar que en 2019 se iniciaron las conversaciones con el Ayuntamiento para dar un uso cultural al edificio de María La Brava.

El proyecto ahora presentado ha sido posible "gracias a la unión de voluntades", ha apuntado, a la vez que ha mostrado la importancia de "la colaboración público-privada, que permite multiplicar capacidades para acometer actuaciones que requieren importantes esfuerzos y dedicación de recursos".

Antes de terminar, el presidente de Unicaja Banco ha manifestado durante su intervención que "este nuevo centro aspira a convertirse en motor de la cultura científica en la región".

CSIC

La presidenta del CSIC, Eloísa del Pino, ha destacado que este nuevo espacio "nace con la vocación de servir como motor de la cultura científica en Salamanca y en Castilla y León, y fundamentalmente como lugar de encuentro para la toda la sociedad castellano y leonesa" y además permitirá "reforzar la presencia del CSIC en esta región".

Asimismo, ha subrayado que la intención del CSIC es que esta nueva iniciativa, la Casa de la Ciencia María la Brava, "se convierta en un referente a nivel nacional e internacional, aportando valor añadido a una ciudad como Salamanca, que ya destaca por su patrimonio histórico y cultural, para favorecer su desarrollo como creadora de conocimiento y como polo de atracción científico y económico".

ALCALDE

Por su parte, el alcalde de Salamanca, ha señalado que la creación de la Casa de la Ciencia en Salamanca dota a la localidad de un instrumento que le aporta "una gran visibilidad" a la labor investigadora que se lleva a cabo en la ciudad y que goza de "un enorme prestigio nacional e internacional".

Según ha comentado, este nuevo recurso supondrá una "ventana abierta a la promoción del valor científico de Salamanca, que tiene la enorme suerte de albergar institutos de investigación del más alto renombre", así como un reclamo que atraerá visitantes, gracias a una oferta científico-cultural que será de "excelente nivel".

Este proyecto, tal y como ha apuntado, se suma a la relación existente de Unicaja Banco con la ciudad, que se ha plasmado en los últimos años con otras iniciativas, como la cesión al Ayuntamiento de Salamanca del Centro Cultural de la Plaza de Trujillo y de un céntrico solar en el Patio Chico, junto a la Catedral Vieja.

INSTALACIONES

La Casa de Doña María la Brava se trata de un inmueble del siglo XV, situado en el número 5 de la Plaza de los Bandos, en el casco antiguo y a unos 250 metros de la Plaza Mayor.

Es un monumento histórico-artístico, rehabilitado en 2008 por Unicaja Banco para uso museístico, tras su adquisición.

El edificio, de cuatro alturas, tiene una superficie útil de 1.282 metros cuadrados y su interior se encuentra remodelado.

Se trata de un gran ejemplo representativo de las casas de la nobleza española de la segunda mitad del siglo X.

Durante bastantes años del siglo XX la casa acogió un liceo escolar y las dependencias del Colegio Farmacéutico Salmantino.

MARÍA LA BRAVA

En cuanto a María Rodríguez de Monroy, la Brava, que da nombre actualmente al inmueble, perteneció a una familia importante del siglo XV, que luchó en "una guerra casi infinita" por "obtener la hegemonía absoluta de la ciudad de Salamanca", en un periodo conocido como 'Guerra de los Bandos', por el enfrentamiento entre diversas facciones, según la información aportada con motivo del acuerdo presentado para la nueva Casa de la Ciencia.

En una de esas luchas sus hijos murieron, por lo que ella se encargó de buscar a los asesinos, mandarlos matar y decapitar. Posteriormente depositó sus cabezas en la tumba de sus hijos. Este hecho hizo que la historia la recuerde con el nombre de Doña María La Brava.